Gaikotsu Kishi-sama Volumen 5 cap 2

Capitulo 2: Viajar es más Disfrutable con Compañía

Dos días después.

Como no tenía ningún negocio urgente, recogí más aguas termales para recuperar mi cuerpo y pasé mis días peleando con Ariane, familiarizándome con el pueblo y aprendiendo a controlar mis emociones mientras luchaba.

Me entrenaba con Ariane hasta el mediodía, luego practicaba un poco de esgrima con mi cuerpo de elfo y terminaba el día explorando el pueblo.

Nunca me di cuenta de cuánto tiempo podría durar un día o lo productivo que era sin televisión, juegos o Internet.

En realidad, me aburría mucho si no hacía algo para pasar el tiempo.

Esa noche, después de haber terminado de bañarme en la bañera privada de la mansión y de haberme sentado a cenar, Glenys me habló del asunto del permiso de viaje.

“El pueblo Landfria ha concedido permiso”

Salté de mi asiento y me acerqué a Glenys cuando oí la noticia.

“Ohh ¿En serio?! ¿Cuándo sale la nave?”

“Cálmate. Hay algunas condiciones que necesitamos discutir primero”

Glenys levantó la mano cuando vio mi confusión.

“¿Condiciones?”

Ya que estaría embarcando en una nave mercante élfica a un reino de hombres bestia, era importante escuchar cualquier estipulación para no causar una conmoción, así que me tranquilicé hasta escucharla.

“Al parecer, ustedes dos tienen una conexión con el anciano del pueblo y le gustaría reunirse con ustedes”

Esta vez fue Ariane quien reaccionó a la declaración de Glenys.

“¿Nosotros dos?”

Glenys asintió con la cabeza y continuó hablando con una mirada dudosa en sus ojos.

“Al parecer, ustedes dos ayudaron al hermano mayor del anciano”

Ariane y yo compartimos una mirada confusa cuando Glenys nos dijo ese pequeño pedazo de información.

Si entendía esto correctamente, entonces ambos estábamos de alguna manera familiarizados con el hermano mayor del anciano de Landfria…Sin embargo, ni Ariane ni yo pudimos darnos cuenta de quién era esa persona.

No había hablado con tantos elfos fuera de los de Raratoia, así que esperé a ver lo que Ariane tenía que decir.

“Nunca he hablado con el anciano de Landfria, ni con alguien que podría ser su hermano mayor…”

Traté de recordar a todos los elfos que había conocido fuera del pueblo, pero sólo una persona vino a mi mente.

Los ojos dorados de Ariane se abultaron al darse cuenta de la única persona que podía haber sido, y los dos gritamos al mismo tiempo:

“¡Casey!” “¿Casey-dono!?”

Casey Held.

Era un extraño investigador de monstruos que vivía y trabajaba fuera del territorio de Buranbeina del Reino Rhoden.

Glenys tenía una sonrisa satisfactoria en su rostro cuando escuchó nuestra respuesta y nos instó a continuar.

“Hmm, no veo ningún problema con reunirme con él, ¿Y tu?”

Después de expresar mi deseo de encontrarme con el anciano, volví a mirar a Ariane para verla sacudir la cabeza.

La sonrisa de Glenys se ensanchó como si algo de esto pareciera divertido.

“Eso es bueno. Ariane, ya recibí permiso de la capital, estarás acompañando a Arc-kun en este viaje”

Ariane parecía estupefacta mientras escuchaba la contundente explicación de su madre.

“E-espera un minuto ¿Tengo que ir también a Fabuna’ha?”

“Está bien. Desafortunadamente, Arc-kun no es oficialmente parte de la aldea todavía. Tuve que usar algunas de las conexiones de tu abuelo y cobrar un favor de otro gran anciano para poner todo esto, así que……”

Glenys había estado caminando hacia su hija mientras hablaba y cuando llegó a Ariane le susurró algo en el oído que le manchó las mejillas de un rojo carmesí y la hizo empujar a su sonriente madre.

Aunque no había esperado que Glenys la hiciera acompañarme por mi egoísta solicitud, estaba demasiado preocupado por la extraña reacción de Ariane como para argumentar en contra de ella.

“…? ¿Pasa algo Ariane-dono?”

“¿Kyun?”

Cuando le pregunté sólo recibí una mirada muda de ella y Glenys sólo se apartó de mí cuando me giré hacia ella.

Ponta parecía preocupada mientras miraba fijamente la expresión silenciosa de Ariane.

“E-estoy bien! Iré contigo……”

Ariane firmó aparentemente la derrota mientras Glenys seguía sonriendo y ofrecía una sugerencia.

“Ya que vas al Continente Sur, ¿Por qué no invitan a esa chica? ¡A Chiome-chan le encantaría ir!”

Ella era muy informal, como si nos estuviera diciendo que trajéramos a un amigo a pasar el rato con nosotros.

Sin embargo, teniendo en cuenta la raza de las personas que gobernaban el país que estaríamos visitando, ofrecerle una invitación a Chiome no era tan extraño.

Chiome era el nombre del miembro de la tribu gato de las Personas de las Montañas y Llanuras que vivían en este continente.

El clan al que pertenecía fue fundado por alguien de mi mundo que se había dedicado a proteger a toda su raza hace siglos, una misión que había sido transmitida a través del clan desde entonces.

Entre el Clan Blade Heart estaba un grupo de seis ninjas capaces de habilidades extraordinarias, y llegué a conocer a un par de ellos cuando los ayudé a emancipar a un grupo de esclavos de la capital.

“Pero, ¿El barco de comercio estaría dispuesto a acomodar a Chiome-dono si ella fuera a venir? Y aunque no parezca así, Chiome-dono tiene muchas responsabilidades que manejar, ¿Estaría dispuesta a ir?”

Con el fin de obtener las negociaciones sobre unirme a la nave comercial en el viaje, tuve que unirme a un pueblo elfo. Así que miré a Glenys para explicar cómo alguien como Chiome podría venir.

Sin mencionar lo mal que me sentía acerca de tomar a un miembro de la fuerza de combate más crucial de la villa escondida en lo que es esencialmente un largo viaje de caza de ingredientes.

Sin embargo, Glenys no pareció preocuparse por esos problemas mientras mantenía su habitual sonrisa.

“¿Sabes que el barco se dirige hacia el país gobernado por la gente de Chiome? Va a haber Personas de las Montañas y Llanuras a bordo de la nave. Incluso si el clan de Chiome-chan está familiarizado con los entresijos de este continente, todavía tienen que viajar más allá del mar. Yo diría que explorar el Reino Fabuna’ha sería beneficioso para ella y su clan”

Si a las Personas de las Montañas y Llanuras se les permitía estar en el barco, entonces no debería haber ningún problema.

La forma en que Glenys lo había redactado hacía parecer que invitar a Chiome sería la causa justa de la reunión de información. Puesto que los humanos manejaban la mayoría del poder en este continente, ella se beneficiaría de una cosmovisión más amplia.

Reflexionando un poco, me giré hacia Ariane para ver lo que tenía que decir.

“Con la magia de transferencia de Arc, no hay problema en pedirle a un amigo de fuera del pueblo que se una a nosotros”

Ariane estaba de acuerdo con la sugerencia de Glenys.

“Hmm, entonces iremos a la villa escondida mañana y la invitaremos”

“¡Kyun! Kyun!”

Con nuestros planes para el día de mañana, Ponta gritó en protesta por la comida tardía, así que la cena fue sacada rápidamente.

Al día siguiente, después de clases de espada y el desayuno, Ariane y yo dejamos el pueblo.

Aunque digo “dejamos el pueblo” realmente no salimos a través de la puerta. En su lugar, invoqué mi magia de transferencia de larga distancia【Transfer Gate】 y el pueblo que nos rodeaba desapareció.

Ahora estábamos en una colina que daba a un pueblo construido en la Cordillera Calcutta del Reino Rhoden.

El pueblo que había sido construido en esta zona infestada de monstruos pertenecía a las Personas de las Montañas y Llanuras y era la base actual del Clan Blade Heart.

El muro exterior estaba hecho de troncos de madera, con un muro de piedra interior que rodeaba el pueblo, y los puntos afilados en lo alto de las murallas parecían más de una fortaleza que de un pueblo.

El puente levadizo que actuaba como la entrada principal estaba sellado para mantener fuera a los intrusos, y había guardias colocados en la atalaya cercana.

Ya que recordaba esta ubicación por nuestro último viaje aquí, 【Transfer Gate】 nos permitió llegar al instante aquí desde Raratoia. Puesto que Ariane y yo éramos extraños y esta era una visita bastante inesperada, era mejor pasar por la entrada principal.

Las Personas de las Montañas y Llanuras tenían habilidades físicas que eran superiores a las de los humanos, incluyendo la audición y la vista.

No me dolió que destacara en esta región montañosa con mi lujosa armadura plateada y el manto negro azabache.

A medida que nos acercábamos lentamente a la puerta del pueblo, los guardias nos vieron de inmediato y enviaron la palabra a los demás dentro del pueblo.

“Eso fue más rápido de lo esperado”

Ariane miró entre la puerta y yo cuando murmuré eso.

En cualquier caso, el traje que llevaba para mantener mi secreto era bastante memorable.

Cuando llegamos a la entrada, uno de los guardias agitó su mano que no sostenía su arma y preguntó:

“¿Cuál es su propósito?”

“Nos gustaría ofrecerle una invitación a Chiome-dono”

Después de mi breve respuesta, la puerta se abrió y nos invitaron a entrar.

Los aldeanos ya habían comenzado su trabajo y las risas de los niños podían ser escuchadas a lo lejos. En general, era mucho más animado que la última vez que estuvimos aquí.

Actualmente, este pueblo estaba superpoblado teniendo en cuenta la cantidad de gente que realmente podía apoyar, pero la noticia de la próxima migración ya debería haberse extendido, ya que había sonrisas brillantes en las caras de aquellos que pasábamos.

Una sola persona gato con una apariencia distinta pronto vino a saludarnos.

Tenía alrededor de ciento ochenta centímetros de alto, tenía cabello blanco y liso que llegaba a su espalda baja y tenía una larga barba y cejas que recordaban a un ermitaño.

“Arc-dono, Ariane-dono, disculpen por hacerlos visitar este lejano pueblo. ¿Hay algo en lo que pueda ayudarlos?”

Este hombre calmadamente sonriente se llamaba Hanzo el 22, y él era el actual jefe del Clan Blade Heart.

Incliné la cabeza y le ofrecí mi propio saludo antes de explicarle el motivo de nuestra visita a Hanzo.

“En realidad, tenemos un pequeño asunto con Chiome-dono……”

A mi comentario, una pequeña niña gato silenciosamente apareció junto a Hanzo y educadamente nos saludó a Ariane y a mí.

“Arc-dono, Ariane-dono, ¿Con qué puedo ayudarlos?”

La chica de cabello negro corto enfocó sus ojos azules en mí mientras esperaba nuestra respuesta.

Estaba vestida con su habitual traje de ninja negro, con sus protectores de brazos, protectores de piernas y la daga que estaba unida a su cintura.

“Oh, Chiome-dono”

Chiome ligeramente asintió con la cabeza cuando dije su nombre.

“Verás, estamos a punto de viajar al Continente Sur en una nave mercante élfica, y Glenys-dono sugirió que te invitamos a unirte a nosotros. Ya que hay un gran país dirigido por las Personas de las Montañas y Llanuras, pensó que te beneficiarías con una visita allí, ¿Qué te parece?”

“¿Oh? El Continente Sur”

Un destello de vacilación pasó por los ojos azules de Chiome, pero se giró hacia Hanzo para ver cómo reaccionaba antes de que pudiera ver algo más.

Hanzo parecía como un anciano amable cuando sonrió y asintió hacia mí.

“Ya hemos enviado a Sasuke a Tsubone, así que no hay necesidad de preocuparse por eso. Pero esta es una buena oportunidad para iluminar a la próxima generación y traer algunos souvenirs para los niños. Cuantos más caminos atraviesa un niño, menos probabilidades tiene de tropezar. Tehee”

Chiome asintió con la cabeza hacia Hanzo y luego me ofreció una profunda inclinación.

“Con mucho gusto acepto su invitación”

“Me alegro de oír eso, Chiome-chan”

Ariane sonrió al oír la respuesta de Chiome.

Aparentemente, ambas llegaron a una amistad instantánea en las aguas termales, cuando había estado en un coma de siete días. La casi inexpresiva Chiome incluso sonrió un poco y su cola empezó a balancearse alegremente hacia adelante y hacia atrás.

A pesar de la ligera sensación de aislamiento que sentía, respiré un suspiro de alivio ya que todos estábamos reunidos.

“Los tres estaremos viajando juntos de nuevo”

Ponta debió de haber tomado algo de ofensa por lo que dije ya que golpeó la parte superior de mi casco en protesta.

Tal vez estaba enojada por no ser incluida en el conteo.

“Oh, lo siento lo siento. No podemos olvidarnos de Ponta tampoco”

“¡Kyun!”

Ponta empezó a menear su cola hinchada cuando empecé a acariciarle la barbilla y empecé a imaginar lo que nos esperaba en el Continente Sur.