martes, 11 de diciembre de 2018

Mushoku Tensei 45

Capítulo 45 - El Año y Medio de Paul

1ª Parte

-- Desde el punto de vista de Paul --


Al despertar, me di cuenta de que me encontraba en medio de una pradera verde, pero eso, una pradera, no había otra forma de describirlo, puesto que no tenía ningún punto llamativo ni distintivo en el horizonte.

Lo extraño es que, por algún motivo, sentía cierta nostalgia o familiaridad con el lugar.

Pasado algunos minutos, conseguí recordar el motivo de esta sensación, y es que me encontraba en una zona al sur del reino de Asura, cerca de un pueblo en el que durante algún tiempo estuve alojado. Fue el lugar en el que estuve aprendiendo el estilo del Cauce Celestial, en otras palabras, cerca de la aldea natal de Lilia.

El pensamiento más natural llegados a este punto es que estaba soñando.

Pero vaya, cuánto tiempo... ¿cuánto tiempo estuve viviendo aquí? ¿1 año? ¿2?

Solo recordaba que no estuve demasiado tiempo en este lugar, ya que la mayoría de mis recuerdos eran en el dojo. Lo que hizo que me acordara de mi senpai del lugar; un capullo despreciable que tan solo se dedicaba a hablar y molestar, así como atosigar y amedrentar a los que le rodeaban para quedarse en la cima.

Odio con todo mi ser ese tipo de relaciones centradas en la jerarquía de más y menos experimentado o de superior e inferiores; fue el principal motivo por el que huí de mi casa, la actitud de mi padre solo permitía agachar la cabeza ante sus acciones, nunca llevarle la contraria.

Pero aunque le odie, mi padre era una persona superior al senpai del dojo, si tuviera que explicar un motivo, sería porque mi padre poseía poder propio y real; mientras que el estúpido senpai que entrenaba conmigo tan solo era un narcisista cuyo ego se había inflado únicamente mediante amenazas vacías y buscando excusas.

Todavía recuerdo cuando conseguí alcanzar el nivel Experimentado mientras el tipo ese todavía andaba atorado como Iniciado; básicamente, ese tipo era solo palabras.

En ese dojo, que era de los más importantes, era el mejor de los alumnos que llevaban años entrenando en el Cauce Celestial; como grupo, tan solo se inventaban excusas para intentar explicar su falta de talento, hasta el punto que llegué a querer demostrarles de una forma clara a esos tipejos lo que significa ser fuerte de verdad.

Aunque al final, eso se quedó en nada, ya que hubo varias cosas que me hicieron marcharme precipitadamente, como la forma en la que abusé de Lilia... que hizo que huyera del lugar.

Desde el principio, mi meta había sido aprender lo que creía necesario y marcharme, hasta que decidí reírme de su incompetencia en combate, así que tampoco fue un problema excesivo para mí marcharme tan pronto.

Recuerdo que esos tarugos sin talento vinieron a por mí, persiguiéndome; me marché del pais en cuanto les ridiculicé...

Pensándolo ahora, me doy cuenta de la actitud tan infantil que tenía en aquel entonces.

¿Qué más da la actitud de ese senpai? Debería haber aceptado el castigo por lo que le hice a Lilia...


"......nn."


Se levantó algo de viento y me entró polvo en los ojos, obligándome a incorporarme para intentar limpiarme; en ese momento, noté como algo tiraba de mi ropa.


"Papá... d-dónde... ¿estamos?..."

"¿Hn?"


Siguiendo la vocecita de mi pequeña, me di cuenta de que Norn estaba fuertemente aferrada a mí, su rostro mostraba su preocupación.

Por lo que finalmente lo comprendí, cogiendo a Norn en brazos, pude notar el suelo bajo mis pies, la textura natural del cesped bajo la suela de mis zapatos de casa, el calor de Norn...

No es un sueño...


"... ¿Qué ha pasado...?"


Soy incapaz de comprender cómo he llegado hasta aquí.

No llega a estar Norn conmigo y hubiera pensado que estaba soñando... Pero Norn sigue agarrada a mi pecho con fuerza y miedo, mi pequeña de 3 años... mi adorable Norn.

Casi nunca estoy con mis hijas, ya que mi idea es que me vieran como un padre estricto aunque confiable, por lo que suelo evitar cogerlas y abrazarlas.

¿Así que cómo llegó Norn a mi regazo...? .... Ahora me acuerdo, hace un rato, no sé cuanto pero creo que no mucho, estaba charlando con Zenith en casa, una conversación sin importancia.


"Conforme tus hijas vayan creciendo empezaran a evitar los abrazos y el contacto con sus padres, así que deja de distanciarte tanto y aprovéchate mientras puedas."

"No lo haré, mi meta es ser un padre honorable para ellas; y a diferencia de Ludeus, Norn parece que será más como los niños de su edad, por lo que debo asegurarme que actúo como un buen padre con ella."

"¿Seguro que no será porque no quieres tanto a tu hijita?"

"¿Cómo puedes decir eso? Vale, vale, deja las bromas y pásamela para tenerla en mis brazos..."


Era una conversación cotidiana con Zenith; mientras tanto, y cerca nuestro, Lilia le daba clases variadas a Aisha, porque por lo visto, quería que se especializara en algo concreto.

En su momento le dije que le dejara más libertad a la niña, pero se opuso fervientemente a mis palabras.

La cosa es que Aisha maduraba muy rápidamente, memorizaba casi de inmediato cualquier cosa que le enseñaras, hasta el punto de que aprendió a andar rapidísimo.

Pero volviendo al asunto, fue en ese preciso instante, en el que de improviso, una luz cegadora nos envolvió a todos.

Por fin recordé lo que pasó, porque cuando esa luz cegadora nos cogió por sorpresa, algo me pasó, tengo recuerdos de un... algo que ocurrió casi de inmediato.

"......¿Papá?"

Norn me miró con cara de preocupación clavándome su mirada.


"No pasa nada."


Con cariño, acaricié su cabeza mientras le sonreía, tras lo que observé los alrededores. Por ninguna parte vi señales ni de Lilia ni de Zenith...

Es raro que ninguna esté cerca... si hubiéramos salido lanzados... ¿por qué Norn está conmigo? Oh... claro...

Recordé una experiencia que tuve en un Laberinto... en una ocasión, acabé siendo presa de una trampa aterradora ya que, por lo visto, la trampa activaba un conjuro de teletransporte.

En aquel momento tuve muchísima suerte y acabé cerca de mi grupo; pero lo importante, es que Elinalise me agarró de la ropa para intentar sacarme de la trampa. Es normal, las trampas por lo general suelen implicar muerte segura, y más si es por magia. Aunque el dichoso mono que iba ojeándolo todo para evitar trampas no se dio cuenta de esa... aunque bueno, cosas que pasan; pero vamos, pero por lo que entendí y pude comprobar, las personas que están en contacto contigo cuando eres sujeto a un hechizo de ese tipo, se teletransportan contigo; por eso Norn está aquí conmigo.

Pero la duda principal sigue sin ser respondida, ¿por qué hemos sido teletransportados? No hubo ningún tipo de aviso ni señal, fue demasiado rápido. Y por otra parte, ¿quién lanzó el hechizo?

Tengo a varias personas que me odian, por lo que no me extraña que hayan llegado a este extremo, pero hablamos de un teletransporte... eso cambia las cosas, no noté ningún cambio en el ambiente, ni escuché el conjuro, por lo que quien fuera, utilizó un objeto mágico de algún tipo, ya sea un círculo u otra cosa, y esas cosas supuestamente son ilegales.

Cualquier objeto mágico que sirviera para realizar teletransporte era algo ilegal a nivel mundial, es un tipo de magia prohibida y casi olvidada en la historia; por lo que no entendía por qué alguien llegaría a tales extremos para vengarse de alguien como yo.

Además, ¿por qué motivo he acabado en un lugar tan apartado? No lo creo... pero quizás... ¿uno de los discípulos del dojo de Lilia? Para vengar lo que le hice a Lilia, me teletransportaron hasta este lugar, para que comprendiera el motivo solo con verlo y lo que tarde en regresar a casa, será suficiente que para cuando llegue, un desalmado o asqueroso hombre se haya aprovechado de Lilia y Zenith en mi ausencia... Mierda, joder... no me extrañaría que esos capullos hayan pensado una venganza así.


"Eh, papá..."

"Norn, no pasa nada. Pronto estaremos de vuelta en casa."


Diciéndolo casi más para mí que para mi pequeña, nos dirigimos a la ciudad.

Doy gracias de que siempre, para casos extraordinarios, guardo 1 Asura de oro en la funda de mi espada, la que siempre llevo encima. Es un hábito que guardé de cuando fui aventurero, y la espada no podía soltarla nunca, ni al dormir; siendo el único momento aceptable para dejarla a un lado el momento en el que acompaño a una mujer.

Otra cosa que ocultaba en la funda, era mi tarjeta de aventurero, también para casos extremos como este.

Me dirigí al gremio de aventureros para cambiar el dinero por el del lugar, acabando con 9 monedas de plata y 8 grandes de cobre...

Han subido las tasas de cambio... aunque con esto será suficinete

Echo un vistazo rápido en el tablón de anuncios del gremio y veo que alguien ha solicitado un envío urgente, que acepto sin dudar, y de paso dejo que la recepcionista recargue el poder mágico de mi tarjeta de aventurero, que hacía años que se había agotado.

Cuando comprobó que mi rango de aventurero era S, se sorprendió mucho, no porque mi rango fuera tan alto, sino porque había aceptado una misión muy simplona.

Por lo general, las misiones de envío no poseen un rango como tal, para que cualquier aventurero pueda realizarlo, aunque normalmente se entienden que son casi de rango E. También por lo general, no me importa explicar el motivo de acciones tan impulsivas como esa, pero en esta ocasión tenía prisa y no quería problemas, por lo que le hice entrega de una moneda de plata.

¿Cuánto hace que no me preparaba para un viaje? Da igual, por mucho que haya pasado, sigo recordando todos los pasos a seguir.

No tardé en prepararlo todo, incluido un caballo que solicité al gremio y que me entregaron en parte por haber aceptado una misión de envío, y en parte porque el rango S ofrece varios beneficios de los cuales, uno era ofrecer caballos gratuitos si era para realizar misiones.

Aunque claro, no es que vaya a devolverlo nada más terminar la misión...

Al partir, me dirigí en una dirección diferente a la del envío que tenía que llevar; me daba algo de pena el cliente, pero lo mío también es urgente.

El caballo que me prestaron era uno excepcionalmente bueno, estaba en racha, mi suerte no parecía tener límites, quizás para ayudarme en la emergencia en la que me encontraba; aunque claro, existía una posibilidad de que me revocaran mi tarjeta de aventurero por aprovecharme de los servicios del gremio... pero que le den, hacía años que había decidido dejar de ser un aventurero...

Coloqué a Norn sobre el caballo y después me monté yo, tras lo que partimos de inmediato hacia la aldea Bonna.




2ª Parte

Norn enfermó durante el viaje. El ritmo excesivo, que era su primera vez a caballo y cabalgar tanto de día como de noche, hizo que tuviera que detenerme en el viaje para cuidarla durante unos días. Por lo que al final, tardamos 2 meses en llegar a la provincia de Fedora.

Joder, eso era lo que hubiéramos tardado si hubiéramos ido en carruaje... y nos hubiéramos ahorrado que Norn cayera enferma.

Además, la misión de entrega urgente había cumplido haría tiempo, aunque no me importaba especialmente. El problema fue cuando llegué a la aldea Bonna... la desesperación se apoderó de mi cuerpo cuando comprendí de verdad la gravedad del asunto.

Toda la provincia había desaparecido y no era capaz de comprender lo que había ocurrido, apoderado por la confusión.

¿Pero qué ha pasado? ¿A dónde ha ido a parar la aldea Bonna? ¿Y Zenith? ¿Lilia?

Me dirigí a la capital, Roa, pero también había desaparecido.

Si Roa no está... ¿Ludeus también ha desaparecido? ¿Pero qué cojones ha pasado...?

Sin darme cuenta, mis rodillas estaban clavadas en el suelo ante el espectáculo.

En mi cabeza, unas palabras rondaban sin dejarme tranquilo de mi época como aventurero: Perdición por trampa de teletransporte.

En varias conversaciones entre aventureros, siempre aparecía esa trampa, encontrada en varios Laberintos, y a la que más miedo y atención hay que tenerle. Hablamos de una trampa que es capaz de acabar con un grupo entero de aventureros, dividiéndoles y haciéndoles perecer sin saber dónde han ido a parar el resto.

Es con creces la peor trampa que te puedes encontrar, un descuido era suficiente...

Varias historias relatan lo ocurrido a grupos que sufrieron el percance de caer en una trampa así, la mayoría de las veces llevaba a la aniquilación del grupo entero. La táctica a seguir si se acaba en una trampa así es detener el avance, retroceder hasta la entrada del Laberinto y reunirse allí; todos los que pasado un tiempo no aparecían se daban automáticamente por muertos.

Cualquiera que escuchaba sobre ellas no podía esconder su asombro y miedo.

Pero, es imposible, ¿no? No estamos en un Laberinto... qué voy a ...


"Papá... casa... ¿dónde?"


Esas palabras me trajeron de vuelta junto con la mano que se agarró a mi ropa, perteneciente a mi pequeña hija de tan solo 3 años... Sin decir nada, la abracé.


"¿Papá, tú bien?"


Sí, soy papá... bueno, un padre. Un padre cuya hija no comprende lo que ha pasado, y haré lo posible para que no se alarme y preocupe demasiado. Soy un adulto, un padre responsable, no puedo dejar ver mis preocupaciones, debo actuar con decisión y demostrando confianza. Mejor así... Las trampas de teletransporte son terribles, y no sé cómo nos hemos visto envueltos en eso, pero seguimos con vida. Zenith ha sido aventurera durante años, seguro que ella también estará viva; Lilia puede que no pueda pelear como antes, pero sabe defenderse; Aisha... Creo... que cuando ocurrió... cuando la luz nos envolvió... ¿iba de la mano de Lilia? Sí, ¿no? Joder.. no lo recuerdo... Olvídalo, no te preocupes por eso, mejor pensar que sí, que Lilia llevaba a Aisha de la mano. Todo saldrá bien.............



3ª Parte

Tras devolver el caballo en la ciudad intacta más cercana, me dediqué a conseguir información sobre lo ocurrido.

Por lo visto, la luz envolvió por completo la provincia de Fedora, que fue lo que provocó el desastre; no se sabe dónde están ni Sauros ni Philip y el control de la región es ahora del hermano de Pilip, aunque por algún motivo, no parece que tenga intención de intervenir y responsabilizarse por lo ocurrido, o al menos no por el momento.

Seguro que están más preocupados por su propio cuello que por ayudar a los habitantes de la región... y el hermano de Philip parece que prefiere mantenerse al margen y no ayudar antes de arriesgarse lo más mínimo. Todos los nobles de Asura me repugnan porque suelen actuar de esa forma.

Mientras reunía información, un hombre algo mayor se puso en contacto conmigo, su nombre era Alphonse, y por lo visto era el mayordomo de Philip cuando ocurrió esto. Por lo que pude comprender, había jurado servir a la familia Boreas Greyrat, y aun en esta situación, no tenía intención alguna de actuar de manera egoista, sino que había incluso ofrecido sus propias tierras y bienes para ayudar en la construcción de un campamento de refugiados.

Me pidió explícitamente ayuda, y cuando le pregunté el motivo, me dijo que porque había oído hablar a Philip de mí; por lo visto las palabras fueron las siguientes:


"Es del tipo de hombre que trabaja duro en situaciones de emergencia, pero es incapaz de preveer los problemas, por lo que acaba metiéndose en líos por ir cometiendo fallos."


Mira lo que va por ahí diciendo... Philip, métete en tus asuntos y déjame en paz.

Por ese motivo, el mayordomo había dudado si intentar contactar o no conmigo, pero debido a que soy el padre de Ludeus, decidió que era mejor ofrecerme su ayuda. Escuchando sus palabras, me siento orgulloso de que Ludeus se haya ganado la aprobación hasta del mayordomo de la casa Boreas; y sin dudarlo acepté su ofrecimiento y ayudé a Alphonse con lo que me iba pidiendo.


Un mes más tarde.

Alphonse cada día busca tanto voluntarios como fondos de aquí y allá para expandir el campamento de refugiados; su habilidad me sorprende muchísimo. Yo, por otro lado, me dedico a realizar batidas en busca de los desaparecidos por la provincia mientras organizo un grupo de aventureros con el nombre Grupo de Búsqueda de Desaparecidos de Fedora; la organización que hemos ido creando se ha ido extendiendo por todo el reino, intentando ayudar a todos los desaparecidos para invitarles al refugio.

Pero mi propósito no es ir salvando desconocidos, sino encontrar a mi familia.

Llegó un punto en el que la fuerza de nuestra organización era suficiente para poder considerarse un reino, lo que ayudó a que Alphonse fuera obteniendo suficientes fondos para la organización y construcción de los campamentos preparados para toda ciudad que hubiera sufrido el altercado.

En todos y cada uno de los campamentos de refugiados, fui dejando una nota informando de lo ocurrido y nuestra situación, además, explicaba que me dirigiría al Sagrado Imperio Milis, concretamente a la sede del gremio de aventureros. Mi meta era enlazar de alguno modo Asura con Milis, para facilitar que la información sobre los desaparecidos llegara a todas partes del mundo, o al menos, mi idea era que encontrar a todos los desaparecidos fuera de una forma rápida y sencilla.

Eso era lo que pensé en aquel entonces, pero fui demasiado inocente...


4ª Parte

Llevo ya 6 meses en Milis, y he de decir que un gran número de personas acabaron aquí.

A todo antiguo habitante de Fedora que encontrábamos, le ayudábamos; aunque algunos fueron vendidos como esclavos... también decidí salvar a estos.

Es un hecho conocido, que si liberas esclavos por la fuerza, estás incumpliendo las leyes del Sagrado Imperio Milis; pero teniendo en cuenta que tanto Zenith como Lilia pueden haber acabado siendo esclavas de alguien, que no quepa la menor duda de que las rescataría sin dudarlo, por lo que extenderé esa idea a todos los antiguos habitantes de Fedora que se encuentren en esa situación.

Esa fue mi actitud en el momento, y desde entonces, siempre recordé que lo hacía por una causa justa, para impedir que cualquier hecho me hiciera dudar de mi convicción.

Y con esa idea en mente, se me ocurrió pedirle apoyo a la familia de Zenith, que son parte de la alta sociedad de Milis, reconocidos por haber concebido a un gran número de caballeros excelentes. No estaba seguro de que fuera una buena idea, pero decidí pedirles ayuda.

Por otro lado, el rescate de desaparecidos avanzaba a buen ritmo; gracias principalmente a la rápida reacción de nuestra organización, un gran número de personas fueron encontradas de inmediato, lo que nos demostró que, como imaginábamos hasta ese momento, muchos antiguos habitantes de Fedora habían acabado en Milis debido al teletransporte.

Lo que teníamos organizado era, que aquellos que pudieran realizar el viaje a pie, recibieran dinero para ayudarles en el viaje de regreso; para los niños y ancianos, encontrábamos un lugar en el que residir mientras organizábamos viajes de vuelta; a los que habían acabado siendo esclavos, se les ayudaba monetariamente para recuperar su libertad o se intentaba presionar utilizando la presión que ejercía la familia de Zenith, Y si todo esto fallaba... nos llevábamos a la fuerza a los esclavos a la mínima oportunidad, cuando no teníamos otra opción para liberarles.

Como era de esperar, empezaron a surgir problemas.

Los nobles de Milis se dieron cuenta de que yo estaba detrás de las desapariciones y secuestros de esclavos, por lo que muchos de ellos utilizaron a su guardia privada para atacarme directamente; estas acciones causaron que varios miembros de nuestro grupo perecieran, pero no me detuve en mi empeño.

Nuestra causa era justa, se habían hecho con esclavos que antes eran habitantes libres que simplemente habían sido teletransportados en un evento fuera de precedentes... teníamos todo el derecho de salvarles.

Por todo esto, los miembros del grupo decidieron seguir a mi lado. Para solucionar las trifulcas que fueron apareciendo, utilicé mi estatus de noble como miembro de la casa Greyrat del reino de Asura, el apoyo de la familia de Zenith y mi pasado como aventurero de rango S.

Por mucho que los problemas fueron allanándose, ni una sola noticia de Lilia o de Zenith llegó a mis oídos, tampoco de Ludeus.

Estoy seguro de que ese hijo mío, iría llamando la atención por donde quiera que fuera, por lo que deberían de haberme llegado rumores suyos... pero parece que por desgracia, nuestra red de informantes no fue capaz de llegar hasta él.



5ª Parte

En total ha pasado ya un año desde el incidente, el tiempo vuela.

Llegados a este punto, los informes sobre ciudadanos encontrados cada vez son más complejos o confusos, además que menos frecuentes; algunos fueron encontrados rondando la zona sur del continente, y alguno menos en la zona norte. También nos llegan noticias del continente central sobre descubrimientos, pero todavía quedan bastantes antiguos habitantes de Fedora que todavía no han sido encontrados y otros que no hemos podido liberar de su esclavitud.

Llegados a este punto, la liberación de esclavos ha seguido el rumbo previsto, y en los casos más problemáticos, necesitábamos tomar custodia de los esclavos para luego liberarlos con negociaciones, pero en muchos casos, teníamos que llegar a usar hasta la fuerza para hacerlo.

Hasta yo comprendo que la aberración a la que nos hemos visto forzados es casi una ofrenta contra casi todos los nobles de Milis, por lo que sé que llegados a este punto, no dejarían las cosas estar en calma sin pelear. Por todo esto, la situación se agravó enormemente debido a que varios miembros de nuestro grupo sufrieron ataques que conllevaron heridas graves o hasta la muerte.

Esto llevó a que algunos miembros me echaran la culpa de la situación en la que nos encontramos en ese entonces.

Claro que podríamos haberlo hecho mejor, nunca imaginé que llegaríamos a estos extremos... pero no podemos permitirnos parar ahora, es demasiado tarde para cambiar lo que ha ocurrido.


Últimamente, cada vez son más los informes sobre refugiados muertos... aunque en realidad nunca han sido pocos, desde el principio gran cantidad de información se refería a Fedorenses muertos... hasta en mayores cantidades que los informes sobre supervivientes. Eto[20], Chloe, Rawls[21], Bonnie, Lane, Marion, Montie...

Cada vez que me llegaba información de uno de mis conocidos, un escalofrío recorría mi espalda; y seguramente por un sentimiento similar al mío, hubo varios miembros de nuestro grupo que se derrumbaron al escuchar sobre fallecidos, otros que se quedaron a un paso del suicidio, y otros a los que nos quedamos a un paso de salvarles... otros acabaron recriminándome mis acciones con preguntas sobre por qué no buscamos en X lugar antes...

Pero en todos y cada uno de esos casos, mi humor se iba hundiendo cada vez más y más... y por si fuera poco, según pasó el tiempo, hasta la información de los fallecidos se volvió difícil de contrastar con mensajes similares a nosequién es posible que esté muerta, un cadáver que se parecía a nosecuál ha sido encontrado, uno que vive en un bosque dice que ha oído sobre otra persona... por todo esto, llegué a la conclusión de que mis acciones habían llevado a la muerte de demasiados.

Porque aun con mis esfuerzos, seguía sin llegarnos noticias de mi familia; dudaba de si había hecho lo mejor, de si debíamos haber ido al continente demoniaco o a la zona norte del continente central... de que puede de que sigan vivos en esos sitios si alguien los ha hecho esclavos, que no deberíamos haber dejado para después los que no eran tan urgentes y haber empezado por los lugares más peligrosos.

Aunque comprendo que esa idea era estúpida, ya que la mayoría de los miembros del grupo de búsqueda no eran combatientes, y que la mayoría son en realidad simples granjeros; por otro lado, sé que a los aventureros o conocidos capaces los había mandado a lugares acordes con su habilidad, aunque no eran muchos.

Los compañeros del grupo que están conmigo son personas que, si hubiéramos ido al continente demoniaco, al norte del central o a Begarito, hubieran sido una molestia en combate; hasta el punto de que tendríamos que rescatar a los que fueron a rescatar...

Por todo esto, creo que hice lo correcto, y que gracias a mis acciones y esfuerzos, miles de refugiados fueron salvados.

Aunque, quizás, si hubiera podido ponerme en contacto con los antiguos miembros de Colmillos del Lobo Negro, yo mismo hubiera podido ir a buscar por Begarito con ellos, y puede que hasta el continente demoniaco. Pero la única persona con la que pude contactar, desapareció en cuanto le informé y ya no sé ni dónde está ni si está ayudando... aunque ninguno de los miembros de ese grupo sería tan desalmado como para no ayudarme con algo así.

Al principio no nos llevábamos bien, luego nos hicimos grandes amigos, aunque luego tuvimos una enorme discusión cuando nos fuimos del grupo.

La peor despedida posible, vaya. Estoy seguro de que todavía me guardan rencor, o al menos, no me extrañaría... pero, ¿por qué permití que tuviéramos un último encuentro tan penoso? Ah... cierto... porque yo era un crío entonces...



6ª Parte

Ya ha pasado año y medio desde el accidente.

Llevo ya un tiempo en el que estoy bebiendo más de la cuenta, hasta el punto de que bebo antes de hacer nada de provecho, borracho desde la mañana hasta la noche, no estoy sobrio ningún momento del día.

Claro que comprendo que no debería hacer algo así, pero siempre que consigo dormir sin estar borracho, me despierto en medio de la noche con pesadillas en las que mi familia ha muerto, o no soy capaz de dormir preguntándome cómo murieron o si quedó siquiera un cadáver... Porque piénsalo, aun con ese hijo mío tan destacable y sobresaliente, no he recibido ni una sola noticia de ningún familiar desde que ocurrió el desastre.

Prefiero no pensar en ellos, ahogar mis penas en alcohol, olvidarme de que pueden estar muertos. Olvidarme de todos los que han esperado en vano mi ayuda durante estos 18 meses y que acabaron encontrando la muerte con lágrimas en los ojos.

Cada vez que pienso en ello, me acabo volviendo loco.

¿Qué coño hago en este sitio? De todos los lugares posibles, ¿qué hago aquí? ¿qué hago que no he ido a buscar a supervivientes a los lugares más peligrosos? Aun yendo solo, seguro que hubiera podido hacer algo por ellos... Cada uno de mis errores de juicio han llevado inequívocamente a las muertes de muchos, gente a la que podía haber salvado, pero que abandoné; conocidos, amigos, amados, hijos.... todos ellos arrebatados y muertos... Antes de ahogarme en mis penurias, prefiero ahogarme en alcohol, es lo único que me permite estar mínimamente alegre.

Pero ese estado me impedía realizar ninguna tarea correctamente, y teníamos previsto volver con los que hubiéramos encontrado a la provincia Fedora en Asura dentro de 6 meses.

Era imposible para mí dejar que enfermos, ancianos, niños y mujeres fueran en solitario nada más encontrarles, sin apenas defensa y en un viaje tan largo... estoy seguro de que muchos de ellos habrían encontrado su fin viajando aunque les hubiéramos cedido 1 Asura de oro para gastos de viaje por cabeza. Ahora sin embargo, la idea es que la mayoría de miembros del grupo de búsqueda de desaparecidos de Fedora les escoltaran, además de tener una enorme ilusión y ganas de volver a casa.

El plan progresaba, y aun siendo yo el responsable de su seguridad, no participaba en las reuniones y me dedicaba a beber todo el día.

Por mucho que todos los miembros principales del grupo de búsqueda, incluyéndome a mí, se quedaran en Milis; la búsqueda de supervivientes se vería casi terminada.

Tras 2 años... Porque en definitiva, la búsqueda de supervivientes terminaría pasados los 2 años desde el evento. Soy de los que opina de que es demasiado pronto para tirar la toalla, mientras que otros opinaban que habíamos hecho suficiente, y que seguir buscando solo sería una pérdida de tiempo y fondos. Pero... al final... no encontré a ningún miembro de mi familia, menuda mierda de padre soy, ¿por qué coño acabé siendo alguien tan inútil? Como si me hubiera estancado siendo un niño, incapaz de madurar hasta el fin de mis días.

Todos los miembros del grupo comenzaron a apartarse de mí, conforme me fui dando a la bebida y empecé a apestar a borracho todo el día. Vamos, lo normal, nadie querría acercarse a un estúpido hombre que tan solo se dedica a beber todo el día.

Aunque existían excepciones, de las cuales una era Norn.


"¡Papá! ¡Acabo de conocer a un señor enorme!"


Aun cuando estaba borracho, Norn se acercaba a mí y me hablaba tan alegremente.

Norn... A día de hoy, Norn es la única familia que tengo, la persona más importante para mí en todo el mundo; no me queda nadie más. Ahora lo recuerdo, ese fue el motivo de que no fuera a Begarito ni al continente demoniaco; es porque Norn me acompañaba, ¿cómo iba a abandonar a mi pequeña de 4 años? ¿qué motivos tenía para dejar atrás a mi pequeña y viajar a un lugar en el que podría morir?


"¿Oh? ¿Qué dices, Norn? Veo que te has divertido."

"¡Sí! ¡Casi me tropiezo antes en la calle y un señor calvo me cogió antes de caerme! ¡Y... mira! ¡Me dio esto!"


Mientras hablaba, Norn me mostró lo que llevaba en sus manos con una enorme sonrisa en la cara. Se trataba de una manzana, roja y con una pinta deliciosa.


"Ya veo, ha sido muy amable, pero dime, ¿le diste las gracias?"

"Sí, le dije Gracias, y, ¿sabes? ¡El señor calvo me respondió acariciándome la cabeza!"

"Bien hecho, Norn, pero ya veo, así que era un hombre amable. Aunque, no deberías llamarle calvo, podría molestarle."


Conversar con mi hija siempre me alegraba el día.

Mi preciada Norn... Sería capaz de enfrentarme a todo Milis si alguien se atreve a ponerte la mano encima.

En esas estaba justo cuando...


"¡Jefe, tenemos un problema!"


Uno de mis compañeros llegó sin aliento a donde me encontraba. El hecho de que me interrumpiera mientras hablaba con mi querida hija me molestó un poco, en estos casos, por lo general, respondía a gritos por venir a molestar; pero con mi hija delante, el poco orgullo que me quedaba me hizo contenerme.


"¿Qué ocurre?"

"¡Mientras hacía el encargo que me pediste nos atacaron!"

"¿Que os atacaron?"


Dice que nos han atacado... pero, ¿quienes? Imagino que son esos nobles desgraciados... Les explicamos claramente que a los antiguos habitantes de Fedora los esclavizaron a la fuerza tras el incidente, putos desgraciados.

En aquel entonces, cuando se lo explicamos, ni recapacitaron ni nos devolvieron a nuestros amigos y vecinos. Por ese motivo, estaba seguro de que hoy también se trataba de mercenarios contratados para recuperar a los esclavos que queríamos liberar.


"Pues nada, ¡todos, coged vuestras armas, y veamos qué pasa!"


Por si acaso, decidí llamar al resto de miembros que estaban en la posada y reunirlos. No es que fueran guerreros extraordinarios, pero dudo que los enemigos fueran tampoco aventureros con años de experiencia en Laberintos; por lo que deberían de servir al menos para disuadirlos.

Mientras se organizaba, me dirigí al almacén donde había aparecido el problema, que se encontraba muy cerca de la posada para poder reaccionar con rapidez si pasaba algo como esto. Aunque claro, el lugar en el que los del grupo de búsqueda se reunían era secreto para que no nos molestaran, por mucho que fuera un edificio cualquiera donde se almacenaban ropajes variados, por lo que sabíamos que tarde o temprano lo descubrirían.

Mierda... es probable que tengamos que cambiar el lugar de reuniones y para llevar a los esclavos liberados.


"Paul-san, solo hay un enemigo, pero es muy bueno, ve con cuidado."

"...¿Combate con espada?"

"No, es un mago, diría que un niño, pero tiene la cara tapada."


Un niñato mago... seguramente sea un novato, pero claro, ¿cómo habrá vencido a tantos adultos? Quizás sea un minero del carbón (Enano) o quizás un cuerpo de niño (Hobbit); si ese fuera el caso, quizás nos esté haciendo creer que es un niño. Por mucho que sea un minero o un cuerpo niño... nah, aun borracho debería poder con él, no creo que un simple mercenario pueda conmigo, pero... nah, dudo que sea un problema.


Y pensando de esta forma, me dirigí al almacen.

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