Capítulo 43 - La Ruta de la Espada Sagrada
1ª Parte
Mañana partimos de la aldea Dordia.
Por algún motivo, Eris y Minitona pelearon, y no es necesario decir que Eris ganó con facilidad. Hablamos de la misma chica que es capaz de seguirle el ritmo a Ruijerd durante el entrenamiento; si tiene como oponente a una chica que no ha recibido ningún tipo de entrenamiento especial en combate, no puede considerarse casi ni una pelea, sino más bien, abusar del débil.
Por este motivo, siento que es necesario que reprenda a Eris por su mala conducta, porque aunque siempre ha sido así, ya pronto cumplirá los 14 años; aunque siga siendo una niña, ya es una edad en la que no puede ir por ahí metiéndose en peleas a la mínima.
Pero claro, cómo decirlo... hasta la fecha, yo casi nunca he detenido las peleas de Eris, ni con los aventureros del gremio, sino que casi siempre dejo que Ruijerd se encargue; por lo que siento, que no soy el más indicado para decirle nada. Aunque suongo que tendré que decirle algo así como Una cosa es pelearse con aventureros y otras con aldeanos y aldeanas.
"T-Te equivocas, Minitona fue la causante."
Tersena, cuando me vio empezar a recriminar a Eris, se interpuso y dijo eso.
Por lo que me está contando, parece que Minitona intentó detener a Eris cuando esta dijo que tenía intención de irse al día siguiente, al acabarse la época de lluvias. Eris hasta se alegró por el gesto, pero le explicó el motivo por el que debía continuar su viaje.
Guau, es una historia contraria a lo habitual, Minitona es la violenta mientras Eris da explicaciones...
La discusión entre las 2 se alargó un buen rato, y aunque al principio estaban tranquilas, poco a poco empezaron a alacorarse. Minitona empezó a hacer comentarios algo ofensivos, dirigidos contra Ghyslaine y hasta contra mí, al parecer; y al escucharlos, Eris se enfadó mucho pero siguió discutiendo con palabras, como si quisiera controlarse y responder calmadamente.
Al final, la que lanzó el primer puñetazo fue Minitona, estoy seguro de que sabía que perdería contra Eris, así que lo tomaré como una muestra de coraje... muy respetable, porque yo sería incapaz de hacer algo así. Pero bueno, lo cierto es que Eris llegó a las manos y como es habitual, no tuvo piedad, dejando a Minitona destrozada.
"Eris."
"¡¿Qué?!"
Antes de hablar, me fijo detenidamente en la situación, empezando por Minitona. La pequeña está respirando inquieta y rápidamente, todavía está viva por llamarlo de alguna forma, teniendo en cuenta que peleó contra Eris, con su habilidad para destrozar mentalmente hasta a adultos consumados... básicamente significa...
"Veo que te contuviste."
"Obviamente."
Eris apartó la mirada al responderme.
Si hubiera sido la Eris que conocí hace años, le habría dado una paliza de muerte a quien tuviera delante, ya sea más o menos joven que ella; teniendo en cuenta que yo estuve en esa posición, mi palabra es de peso.
"Es raro que te contengas, ¿no crees?"
"...... Sigue siendo mi amiga."
Observo la cara de Eris y veo que muestra una mueca de arrepentimiento por lo que hizo.
Jum... Parece que se arrepiente de haberle pegado, es algo nunca visto en Eris; parece que ha madurado mucho en estos últimos meses, seguramente en sitios donde no pude vigilarla. En ese caso, solo hay una cosa que puedo decirle.
"Si eso es cierto, lo mejor es que te reconcilies con ella antes de que partamos mañana."
"Nunca."
...Sigue siendo una cría...
2ª Parte
El último día antes de partir, estuve muy ocupado preparando el viaje, por lo que no pude ir a saludar a Bestia Santa. Llegué a pensar que el culpable de que escapara volvería a ayudarla a que viniera a verme, pero veo que no.
En su lugar, lo que apareció en medio de la noche fue una pareja de intrusas.
THUD
"¡¡Ah!!"
Un fuerte sonido junto a un gritito en medio de la noche, con sonidos así de inesperados, hasta yo me desperté. Como empiezo a ponerme en forma para el viaje tras varios meses tranquilo, al levantarme rápidamente agarró mi váculo.
Para ser ladrones, son un poco ruidosos, y Ruijerd debería de haber reaccionado hace tiempo... Jum...
"Terse-nya, no te quedes quieta de repente-nya."
Suelto el váculo y comprendo el motivo por el que Ruijerd no hizo nada.
"Lo siento, Tona, pero está oscuro."
"Si prestas atención, podrás ver por donde vas-ny...¡Ah!"
THUD
Nuevamente, otro ruido de golpe.
"Tona, ¿estás bien?"
"Duele-nya."
Es posible que se piensen que están susurrando, pero el volumen al que hablan es suficiente para que casi pueda escuchar toda su conversación.
Me pregunto con qué objetivo habrán venido, ¿será fama o dinero?[85] Aunque quizás hayan venido en busca de mi cuerpo... Nah, es broma.. seguramente vengan a ver a Eris.
"Ah, ¿es aquí-nya?"
"¿Sniff-sniff? Puede, pero es un tanto diferente."
"Miremos a ver-nya, aprovechando que están dormidos-nya."
Por sonidos, pude escuchar como se pusieron frente a la puerta, y la abrían, para entrar. Una vez dentro, las pude ver echando un vistazo a la habitación, y cuando llegaron a mi cama, me pudieron observar sentado y nuestras miradas se cruzaron.
"...¡Nya!"
"¿Tona? ¿Qué pasa?.... Ah."
Como era de esperar, Minitona y Tersena entraron en mi habitación, pude verlas vestidas con un camisón hecho de cuero bastante fino en el que había un agujero en la parte baja de la espalda por el que asomaban sus colas, por lo que me habían contado, este era el pijama característico de la raza feral.
Adorablemente encantador...
"¿Qué hacéis aquí tan tarde? Solo para que lo sepáis, pero el cuarto de Eris es el de al lado."
Hable tan bajo como me fue posible.
"P-Perdona-nya..."
Tras disculparse, se dirigieron a la puerta pero Minitona se detuvo de improviso.
"Ahora que me acuerdo-nya, nunca te di las gracias por aquello-nya."
"Ah, ¿To-Tona?"
Minitona, o Tona, que es como la llama Tersena, se giró y volvió a entrar en la habitación, mientras Tersena la seguía.
"Te agradezco que nos salvaras-nya. Me dijeron que podría haber muerto si no me hubieras curado con magia-nya."
Es posible, tenía heridas muy graves... Si me hubieran hecho eso a mí, no habría tenido la voluntad para seguir resistiéndome como ella. Me sorprendió que hubiera sido capaz de aguantar en ese estado con esa ímpetu.
"No te preocupes, no me costó nada hacerlo."
"Pero gracias a ti no quedó ninguna marca de aquello-nya."
Mientras decía esto, Tona tiró del borde de su camisón levantándolo y dejándome a la vista sus preciosas vistas al natural, lástima que la habitación estuviera oscura, por lo que no pude ver nada más a parte de eso.
¡Siento que puedo verlo pero en realidad nooooo! ¡Kishirika-sama, ¿¿por qué no tenías para elegir un ojo místico que viera en la oscuridad??!
"¡¿Tona?! No seas vulgar."
"No pasa nada-nya, es algo que él ya ha visto antes-nya."
"Pero recuerda lo que dijo Gyges-ojii-san, los machos humanos se pasan todo el año en celo y que si te les acercas sin cuidado te acabarán asaltando."
Mira que decirles que estamos en celo todo el año... aunque bueno, la verdad es que no se equivoca.
"Pues si disfruta viéndome-nya, me valdría como forma de devolverle el favor que nos hizo- ¡¡¿Nya?!! ¡¿Y-y-y este f-f-frío que s-s-siento-n-nya?!"
"Eso te pasa por levantarte tanto rato la falda."
Aparte la vista de inmediato de las piernas de Tona en cuanto noté un helado escalofrío; hasta el punto de que agarré inconscientemente mi váculo mientras quitaba el sudor frío que recorría mi frente.
Uooh... esas ganas de matar que puedo sentir desde la habitación de al lado me han asustado...[86]
"E-ejem... me basta con tu gratitud. Y si buscabais a Eris, se encuentra en la habitación de al lado. Buenas noches."
Es posible que sean unas niñas, pero deberían cuidarse de ir por ahí mostrando más carne de la cuenta, podrían acabar siendo atacadas por un peligroso viejo al que le gusta ayudar a los niños...[87]
"De acuerdo, pero de verás, muchísimas gracias-nya."
"Muchas gracias, Ludeus-dono."
Las 2 chicas inclinaron su cabeza antes de salir.
Pasados unos segundos, decidí pegar la oreja a la pared para intentar escuchar lo que ocurría. Pude escuchar la voz de Eris preguntándole que qué quiere a Minitona; no me cabe duda de que con su pose de brazos cruzados y barbilla levantada.
Me cuesta escuchar lo que dicen Minitona y Tersena, pero es que Eris habla bastante alto.
Escuchándoles algo preocupado, pude notar como la voz de Eris fue calmándose poco a poco, dejándome más tranquilo, por lo que volví a dormirme.
Me dio la impresión de que se quedaron charlando durante toda la noche, aunque no sé bien de qué. El nivel de Tona y Tersena con el idioma humano no es excesivamente alto, y aunque Eris aprendió algo del idioma del Dios Feral, es insuficiente para mantener una conversación. Me pregunto si habrán sido capaces de entenderse.
Sigo durmiendo algo inquiet, pero al día siguiente, mientras nos despedían, Eris le dio un apretón de manos a Minitona mientras lloraba.
Veo que fueron capaces de hacer las paces, me alegro, me alegro."
3ª Parte
La Ruta de la Espada Sagrada, es un trayecto amplio y allanado que atraviesa en línea recta el Gran Bosque hacia Milis-Sion. cuenta la leyenda que la mismísima Santa Milis creó esta ruta con su desbordante poder mágico.
Mientras lo recorremos, compruebo que aunque todo cuanto rodea el camino está encharcado o inundado, la ruta está completamente seca; y tampoco parece que los monstruos se acercen a ella.
Nos encontramos yendo en un carruaje que los de Dordia nos hicieron entrega, junto con todo cuanto fuera necesario para el viaje.
Carruaje + Caballo + Dinero para el viaje ( 5 Milis de oro y 5 Milis de plata ) + Raciones y agua.
Con todo esto, no es necesario para nosotros regresar a Puerto santo para ir en dirección a la capital de Milis. Pues mejor partimos hacia allí directamente.
Justo cuando nos disponíamos a partir, por algún motivo, un hombre con cara de mono decidió unirse a nosotros.
"Bue~no, bue~no, justo ahora andaba pensando en regresar a Milis; y veo que llego justo a tiempo. Me gustaría acompañaros."
Gisu, el novato, se montó sin reparo alguno en nuestro carruaje mientras decía eso.
"¿Qué tal, Gisu?"
"¿Tú también te vienes?"
Ninguno de mis compañeros pone algún impedimento; pero extrañado por su actitud, les pregunté que de qué se conocían.
Por lo visto, a mis espaldas, Gisu se dedicó a preparar el terreno con Eris y Ruijerd. Aprovechó historias curiosas sobre sus viajes para hacerse amigo de Eris, Minitona y Tersena; y con Ruijerd y Gustav algo similar, pero con batallitas sobre los viejos tiempos.
Parece que aprovechó su carisma para ganarse a esos 2 con sus palabras para que no le pusieran pegas para incorporarse al vieja, pero eso, a mis espaldas.
"¡Marchemos pues!"
Con el grito de Ruijerd y tirando de las riendas, el carruaje se puso en marcha. En la parte trasera, Eris sigue despidiéndose de los aldeanos ferales que vinieron a decirnos adios, está llorando mientras mira a Minitona y Tersena, y los demás; es bastante conmovedor.
Pero por algún motivo, algo continúa inquieto en mi corazón sobre las acciones de Gisu.
Si hubiera querido venir con nosotros, tan solo tendría que haberlo dicho desde un principio; no era necesario que actuara de forma tan sospechosa y en las sombras. Con que me lo hubiera pedido no habría tenido problema en dejarle que viniera.
"H-Hey, senpai. No me mires así de serio."
Dentro del carruaje, mientras este tambaleaba por el movimiento, mi cara mostraba mi descontento con la situación. Gisu por su lado, se puso a sonreír de oreja a oreja mientras se acercaba a mi oído.
"Que sepas que el cupido que te ayudó con tu amor fui yo..."
Y por algún motivo, se puso a hablar de algo extraño.
¿Que me ayudó con mi amor...? ¡Pero si hiciera lo que hiciera durante estos 3 meses, desde intentar acercarme a chicas gato o chicas perro, no he podido ponerle la mano a ninguna! ¡Y tampoco ha habido avances con Eris! Y espero que no se refiera a que ayudó para que consiguiera llevarme mejor con Gyges, porque me va a enfadar, ¿esa es tu ayuda en el amor? ¡Pero si mis gustos son claros!
"¿Que me ayudaste en el amor? ¿A qué te refieres?"
"Conseguí que te vieras con Bestia Santa, ¿no es cierto?"
"¡¿Con Bestia Santa?!"
Solo con escuchar esas palabras fue fácil de comprenderlo.
"Hijo de...."
¡Tú eres el maldito criminal! ¡¿A qué viene eso de ayudarme con mi amor?! ¡Pero si te dije en la celda que lo mío con el perrete eran calumnias! Aunque espera un segundo...
"¡¿C-cómo hacías para sacar a Bestia Santa de su santuario?!"
"Secreto profesional. Aunque bueno, los guardias son bastante idiotas, la verdad; con una pequeña distracción era suficiente para poder sacarla sin problema."
Dijo esas palabras sin darle importancia pero con mucha seguridad.
Pero... pero... era peligroso, ¿no es así? Porque los de la raza feral estaban extremadamente enfadados y en tensión por las desapariciones de Bestia Santa. No me hubiera extrañado que si te pillaban te arrancaran las extremidades o algo similar...
"¿P-Por qué hiciste algo tan arriesgado?"
"Porque te gustan los perros, ¿no, senpai?"
"Te dije que eran calumnias que se inventaron."
"¿En serio? Bueno, qué más da."
Y sin darle más revuelo, Gisu dijo eso sin prestarle mucha atención y se puso a reírse a carcajadas. Al verlo, por un instante, la preocupación invadió mi cuerpo.
El tío este... será posible que sea... ¿realmente peligroso? Siento que es mala idea dejar que nos acompañe en nuestro viaje.
"Ruijerd-san, da media vuelta."
"¿Por qué?"
"Porque debemos entregar a la justicia al criminal que dejó escapar a Bestia Santa."
"P-Per.. ¿qué dices? ¡Esp-Espera!"
Gisu cayó presa del pánico e intentó taparme la boca con sus manos.
Por tu culpa, Gisu, no dejaron de dudar de mí ni un solo día; es mi deber sellar mis emociones y entregarte para asegurarme de que te castigan por tus fechorías.
"No tengas miedo, novato, les explicaré lo ocurrido a los de la raza feral. Como mucho te encerrarán en prisión desnudo y te tirarán agua fría, pero seguro que puedes soportar algo como eso."
"¡Ey, un segundo! ¡¿No es una broma?! Pues que sepas que el que organizó todo para que os dieran un carruaje fui yo; porque su cultura no es de pedir perdón entregando cosas materiales. ¡Venga tío, déjalo estar, que te he echado un cable!"
Podía ver en su cara de mono lo desesperado que estaba, aunque también lo bien que manejaba las palabras.
...Pero sé que no es un mal tipo... fue fácil de entender con el tiempo que nos tiramos juntos en prisión; y tampoco es que estuviera sacando a Bestia Santa de su santuario con algún objetivo oscuro en mente. Pero claro....Hmmm....
"Ludeus."
"Dime, Ruijerd-san."
"Perdónaselo."
"¡Danna![88] ¡Se lo agradezco mucho, danna! ¡Vaya~, siempre supe que mi danna era un hombre generoso y grandioso!"
Per será... aunque a todo esto.
"Ruijerd-san. ¿Estás seguro? ¿No sería el tipo este uno de esos malhechores que odias?"
"Es muy probable que lo hiciera pensando en tu bienestar."
Me cuesta comprender con exactitud lo que Ruijerd utiliza para juzgar a la gente en quienes son pasables y quienes no; aunque es posible que se deba al trabajo de campo que preparó Gisu con antelación. Será mamón el mono este... qué bien preparado lo dejó todo.
"¡Tiene razón, danna! ¡Lo hice pensando en senpai! Jamás se me ocurrió que se convertiría en un problema tan grave, y es cierto que me pasara un poco de la raya, ¡pero bajo ningún concepto lo hice con la intención de causarle problemas a nadie!"
Si soy sincero, le debo una al tipo este, de cuando en esa celda fría, estando desnudo me hizo entrega de su chaleco. Puede que la proporción sea pequeña, pero si lo comparamos con la raza feral, que aun sabiendo que me había calumniado con anterioridad siguieron haciéndolo; el gesto es mucho más valioso.
Pero bah, qué importa, no es que realmente nadie acabase sufriendo por sus actos, y por si fuera poco, los propios guardas ferales aprendieron la lección con lo ocurrido. Aunque siento que me han forzado a aceptar la situación, pero ya da igual.
"Vale, acepto que vengas con nosotros, novato, pero dime, ¿no le temes a la raza Supard?"
Esto último lo pregunté tranquilamente y con un tono que Ruijerd también pudiera oír, porque tengo dudas sobre si el cara mono sabe si Ruijerd es un Supard o no.
Teniendo en cuenta que estuvieron contándose batallitas y bebiendo juntos es muy probable que ya lo sepa, pero no me gustaría que pasados unos días diga sorprendido ¿Eres un Supard? AHHH y armara un jaleo evitable.
"¿Cómo no voy a temerles? Soy de la raza demoniaca, sé bien los motivos para tenerles miedo, es algo que nos enseñan desde pequeños, contándonos historias sobre que vendrán a comernos."
"Entiendo. Pues qué casualidad, porque aunque no lo parezca, Ruijerd es un Supard."
Ante mis palabras, Gisu entrecerró los ojos como si me mirara acusatoriamente.
"Danna es distinto; y no son solo palabras, le debo la vida."
Siento curiosidad por sus palabras y le mando una señal visual a Ruijerd con los ojos, aunque él me responde negando con la cabeza.
Por la respuesta de Ruijerd, al menos lo de salvarle no es algo que haya ocurrido en estos 3 meses.
"Como imaginaba, ya no lo recuerdas, danna; es normal, eso fue hace 30 años."
Mientras pensaba en ello, Gisu se puso a contar su historia sobre como se conocio una pareja, se divirtieron juntos, con un clímax[89], y la escena en la que se confiesan su amor superando todas las fronteras; una historia excelente. Luego avanza en el hijo fruto del amor de esa pareja, un joven carismático y esculpido por dioses se marcha en busca de aventuras y a sus espaldas 100 mujeres gritándole ¡No te vayas, quédate!, soltándose de sus brazos comienza su viaje alejándose de su ciudad natal, para años más tarde volver con una mujer desconocida y preciosa....
Es una historia larguísima, así que lo resumiré en una sola línea; cuando todavía era un aventurero novato, hubo una ocasión en la que le atacó un poderoso monstruo, y estando a punto de morir Ruijerd le salvó.
"Bueno, es algo que pasó hace 30 años, pero siento como si hubiera pasado ayer. En definitiva, los Supard me siguen dando miedo, pero con danna es distinto."
El novato cara mono lo dijo mientras se reía jubilosamente, haciendo que la expresión de Ruijerd se quedara algo embobado mirándole.
Creo que es la primera vez que he visto una representación tan clara de la palabra Karma[90]. Me alegro por ti, Ruijerd.
"Pero entonces, senpai, ¿me dejarías acompañarte una temporada? Para honrar nuestra antigua camaradería."
Y así fue como el novato cara mono acabó entrando en Dead End... aunque no es que realmente entrara en el grupo, sino que nos forzó a dejarle acompañarle hasta la siguiente ciudad, más o menos.
Cuando le pregunté por qué no quiso formar parte de nuestro grupo de aventureros, me dijo algo sobre una superstición en la que los grupos de 4 personas traen mala suerte o algo similar.
Entiendo que le haya calado una superstición como esa, ninguno de sus antiguos compañeros fue a ayudarle cuando lo encarcelaron en prisión. Pero bueh, si no quiere unirse a nuestro grupo, tampoco voy a obligarle.
Y de esa forma, en este viaje, el número de personas incrementó en 1.
4ª Parte
Con solo darle velocidad al carruaje, fuimos capaces de salir del Gran Bosque, el camino era una total y absoluta línea recta que se pierde en el horizonte hasta llegar a la capital del Sagrado Imperio Milis.
Justo cuando me preguntaba de dónde había salido un camino como este, sin monstruos y con tan buen sistema de drenado de aguas, Gisu comenzó a explicarlo antes de que lo preguntara en voz alta.
Esta carretera fue creada por el santo Milis, fundador de la iglesia Milis, la mayor organización religiosa en este mundo. Cuentan las leyendas que esta carretera es el resultado de un solo golpe de espada del santo, que llegó a cortar los mismísimos bosques y montañas hasta partir en 2 a uno de los Grandes Reyes Demonio en el continente demoniaco, o algo por el estilo. Pero basándose en esas leyendas, se bautizó este camino como la Ruta de la Espada Sagrada.
Por lo general pensaría que esas leyendas son un cuento, pero soy capaz de sentir magia residual proveniente de la ruta; prueba de ello, es que en todo nuestro trayecto, no hemos visto ni un solo monstruo; y aun habiendo partido justo después de la época de lluvias, no nos hemos encontrado ningún trayecto impracticable.
En definitiva, todo va viento en popa.
Es bastante milagroso, la verdad; no me cuesta ver como ha conseguido la iglesia Milis tanto poder en este continente. Pero no sé, me hace temer la posible influencia de este poder mágico residual en el cuerpo humano... porque por útil que sea la magia, es un hecho probado que causa que los animales se conviertan en monstruos, o que unos niños acaben teletransportados en el continente demoniaco, como otros hechos también bastante reprochables. Y esta carretera tiene una cantidad de poder mágico residual digna de temer... pero bueh, vamos a salir pronto de ella porque podemos viajar con calma ya que no nos atacarán monstruos.
5ª Parte
A menudo, junto a la Ruta de la Espada Sagrada, podemos encontrar zonas concretas preparadas para acampar que han ido usando otras personas que fueron por este camino.
Aprovechamos una de ellas y nos preparamos para pasar la noche. No tenemos problemas de comida, pero Ruijerd fue al bosque a cazar cualquier cosa que nos fuera haciendo falta; y de vez en cuando aparecía algún miembro de la raza feral que venía vendiendo productos, aunque realmente tenemos todo lo que nos pueda ir haciendo falta.
No lo he dicho hasta ahora porque pensé que no era importante, pero en el Gran Bosque, la vegetación es abundante. Esto hace que a ambos lados de la carretera hayan plantas que puedas utilizar a modo de especias, y que yo me dedico a recolectar aprovechando los conocimientos de la enciclopedia que me regalaron mis padres en mi cumpleaños.
Pero aunque tengamos todo lo necesario, mis habilidades culinarias no están demasiado entrenadas. Puede que haya estado subiéndola durante todo el año pasado, pero simplemente he pasado del nivel novato a aprendiz.
Lo bueno del Gran Bosque es que la calidad de los ingredientes es increíblemente alta, sobretodo comparados con los del continente demoniaco. Para empezar, no solo hay monstruos por la zona, sino que también hay animales normales, como conejos o jabalís.
Solo con cocinar la carne de estos animales es suficiente para que esté riquísima, pero ya que los ingredientes son de tan alta calidad, me gustaría comer una carne exquisita. Demostrando el dicho nunca es suficiente.
Pero en esa búsqueda ambiciosa de sabores superiores, Gisu hizo su aparición, como el chef indiscutible y su maestría con la cocina en un camping.
Cogió las hierbas y bayas que fui recogiendo y casi como por arte de magia, la convirtió en un condimento fabuloso para la carne.
"Ya te lo dije, ¿no? Puedo hacer de todo."
Su chulería no eran solo palabras, la carne estaba increíblemente buena.
¡¡Eres fantástico, hazme tuya!!
Me dejé llevar tanto por la situación, que involuntariamente le di un fuerte abrazo, para el que hizo ascos al momento.
Perdona por lo que hice, pero a mí también me ha dado asco haberlo hecho.
6ª Parte
"Me aburro."
Eris dejó escapar esas palabras conforme nos organizábamos para hacer la comida una vez más.
El encargado de recolectar los ingredientes es Ruijerd; el encargado de hacer el fuego y traer agua yo (con magia); y el encargado de cocinar es Gisu. Con una distribución tan perfecta de los roles, no quedaba nada que Eris pudiera hacer, salvo quizás ir a recolectar leña, pero como estamos en medio de un bosque, no es un trabajo que dure mucho; por lo que se aburre bastante.
Los primeros días, se dedicó a hacer ejercicios con la espada por su cuenta; ya que desde el principio, Ghyslaine la obligó a hacerlos para ejercitar su memoria muscular y su paciencia a base de repeticiones, por lo que a estas alturas, Eris puede estar haciendo esos ejercicios durante el tiempo que sea necesario. Dicho esto, si le preguntaras si es algo divertido de hacer, parece que la respuesta será un rotundo no.
En este preciso momento, Ruijerd anda cazando, mientras Gisu prepara una sopa para la comida y yo mientras aprovecho para crear con magia una figurita.
Todavía falta mucho hasta que tenga terminada esta figurita 1:10 de Ruijerd, pero creo que se venderá bien; sobretodo por el valor añadido de que si la llevas encima, jamás te atacará ningún supard, sino que podrás hasta llevarte bien con ellos. O algo parecido diré.
Pero dejando eso a un lado, Eris parece estar a punto de explotar por el aburrimiento.
"¡Eh, Gisu!"
"¿Qué pasa, ojou-sama? Si es por la comida, todavía no está lista."
Gisu, con un cuenquito con el que estaba probando la sopa, se giró para responderle, encontrándose con la típica pose de Eris cuando actúa de forma imponente.
"¡Enséñame a cocinar!"
"No quiero."
La respuesta de Gisu fue instantánea, tras lo que siguió cocinando como si nada hubiera pasado, dejando a Eris anonadada sin saber cómo responder.
Aunque no tardó en recomponerse y alzar la voz.
"¡¿Por qué no?!"
"Porque no quiero enseñarte."
"¡¿Pero por qué?!"
Gisu se detuvo soltando un largo suspiro.
"A ver... mira, jovencita, los espadachines lo que tienen que hacer es solamente preocuparse en pelear. TAprender a cocinar es perder el tiempo para ellos, lo único que deben aprender es sentarse y comer lo que haya."
Una cosa que puede que no haya dicho de este hombre, lo que en esta ocasión hay en la mesa es una comida de infarto... El nivel de Gisu en la cocina es suficiente como para abrir un restaurante. Quizás no tenga nivel para conseguir que el mismo Emperador de Japón lance rayos por la boca gritando lo rico que está, pero sí que es nivel suficiente para que un restaurante se haga famoso en una ciudad.
"Pero, tú sabes... si pudiera cocinar.. pues eso..."
Eris hablaba repentinamente de forma entrecortada mientras me lanzaba alguna que otra miradita furtiva.
¿A qué te refieres, Eris? Dilo claro, si no no sabré lo que quieres decir; siéntete libre para decirlo abiertamente.
"¿Pues eso qué? No te entiendo."
Gisu responde a Eris con un trato duro y sin tacto.
No entiendo el motivo por el que se pone así, pero con Ruijerd y conmigo no ha sido tan frío en ningún momento y parece que solo actúa así con Eris.
"Ojou-sama, ¿no tienes talento con la espada? Pues despreocúpate de aprender a cocinar, ni que te hiciera falta."
"Pero..."
"Pero nada, saber pelear es algo de lo que sentirse orgulloso; es más, creo que es lo más importante para poder vivir en este mundo, por encima de todo lo demás. Si te dedicas a otras cosas, lo único que conseguirás será perder de vista tus objetivos más importantes."
Eris estaba claramente molesta, pero no se lanzó a darle puñetazos a Gisu.
Pero es cierto que las palabras del cara mono tiene un extraño poder de convicción.
"Aunque claro, esa es la excusa que digo siempre."
Gisu, tras probar la sopa hizo un gesto de aprobación y se puso a servir la sopa en unos cuencos de piedra, que por cierto, yo mismo hice con magia.
"¿Sabes? La razón principal para negarme es que decidí no volver a enseñar a cocinar a nadie más."
Gisu se dispuso a contarnos una historia en la que por lo visto, hace años formaba parte de un grupo de aventureros que se dedicaban a explorar Laberintos. Era un grupo de 6 en el que todos, salvo él, solo eran capaces de hacer una única cosa; gente bastante torpe en general. La frase más usada por Gisu en aquel entonces era Chicos, no sabéis hacer nada sin mí.
Pero por lo que cuenta, ese grupo de aventureros fueron capaces de funcionar muy bien aun siento tan especiales.
Aunque un día, una de las mujeres del grupo le pidió a Gisu que le enseñara a cocinar; porque por lo visto, quería ganarse el amor de un hombre a través del estómago, práctica que parece funcionar en este mundo también. Gisu no le dio importancia entonces y le enseñó a cocinar.
Pero luego, ya fuera porque aprendió a cocinar o por cualquier otra cosa, pero el resultado fue que la mujer consiguió ganarse al hombre al que le había echado el ojo y acabaron casados, para después salirse del grupo e irse a alguna parte juntos.
Tras esos eventos, como 2 personas importantes para el grupo se fueron tan de improviso, las relaciones en el grupo se desestabilizaron, lo que llevó a una espiral de peleas internas y falta de motivación que les impidió completar más tareas del gremio, y acabaron separándose poco tiempo después.
Aunque no se lo esperaba, Gisu era una persona capaz de hacer cualquier cosa salvo combatir, no tenía talento ni con la espada ni con la magia, pero cualquier otra cosa la hacía sin problemas; por lo que pensó que no tendría dificultades para encontrar un nuevo grupo de aventureros al que unirse.
Pero la realidad fue muy distinta a lo que se esperaba.
Por aquel entonces, Gisu era bastante famoso como aventurero, pero por algún motivo, no conseguía encontrar un grupo que le dejara unirse.
El motivo resultó que Gisu podía hacer de todo, principalmente, todo lo que un aventurero pudiera hacer salvo combatir; pero como es algo que cualquier aventurero podía hacer llega un punto en que todos los miembros de un grupo han ido distribuyendo entre todos las tareas variadas a realizar, como comerciar, cocinar o dialogar.
Y fue en ese momento en el que Gisu lo comprendió, y es que su antiguo grupo era el único lugar hecho para él, debido a que sus compañeros entonces eran demasiado especializados, él suplía ese vacío con su variedad de habilidades.
Por lo que tras darse cuenta de este problema, Gisu decidió olvidarse de vivir como aventurero, y decidió dedicarse a las apuestas.
"Por ese motivo me he negado, nunca enseñaré a otra mujer a cocinar, es una maldición."
Personalmente, opino que esa maldición de la que habla es una tontería; no pasa nada porque le enseñe a cocinar cosas sencillas, como por ejemplo la sopa esta.
De un solo sorbo ha hecho que mi interior haga el equivalente a un Shubidu~biduba~.
Queda confirmado Gisu puede convertir cualquier cosa en el equivalente a Scooby Snacks[92]... Vamos, está tan rica que hasta yo quiero que me enseñe.
Por este motivo decido echarle un cable a Eris.
"Novato, entiendo que acabaras pasándolo mal con todo eso, pero al menos, la mujer a la que le enseñaste a cocinar tuvo su final feliz, ¿no es así?"
Si hiciste a alguien feliz, es motivo suficiente para que vuelvas a hacer, o eso es lo que quería hacerle ver. Pero en respuesta, Gisu negó con la cabeza.
"No estoy seguro de si esa mujer tuvo su final feliz o no; ya que no la he vuelto a ver desde entonces."
Y se puso a reírse de un chiste que solo él comprendió.
"Y por el hombre al que conquisto, imagino que sí fue feliz, aunque quizás no..."
Por todo eso supongo que lo ve como una maldición, pero viéndole deprimirse ligeramente tras contarnos eso, decidí que era mejor no decir más.
Ruijerd, ¿por qué no te das un poco de prisa para volver...?
Ell ambiente está tan apagado y tenso que la riquísima sopa ha perdido todo su sabor.
7ª Parte
Un día cualquiera, encontramos un extraño monumento de piedra en uno de los lugares preparados para acampar.
Era algo así como una piedra que me llegaba por la rodilla en la que varios emblemas estaban gravados en la piedra; en el que un gran símbolo estaba rodeado por otros 7 más pequeños.
Si no me equivoco... el símbolo central está en idioma del Dios Combatiente[93]... creo que significa 7. El resto de emblemas me suenan de algo, pero no sé bien de qué...
Mi confusión me lleva a preguntarle a Gisu a ver qué sabe él.
"Eh, novato, ¿que es ese monumento de piedra?"
Gisu le echó una ojeada a la piedra que le señalaba y asintió con la cabeza.
"Ah, eso, se trata del monumento a los 7 Campeones Mundiales."
"¿7 Campeones Mundiales? ¿Y quienes son esos?"
"Básicamente, los 7 guerreros más poderosos de todo el mundo."
Según se cuenta que, para cuando acabó la 2ª gran guerra entre humanos y demonios, a un ser conocido como el Dios de las Técnicas[94] se le ocurrió crearlo.
Ese Dios de las Técnicas era conocido como el ser más poderoso de aquel entonces, y ese mismo ser calificó bajo su punto de vista a los 7 seres más poderosos de este mundo. Este monumento de piedra fue utilizado para constatar ese listado supuestamente.
"Si mal lo recuerdo... sobre esto debe saber más danna que yo. ¡Danna!"
Al oír a Gisu llamándole, Ruijerd dejó de entrenar con Eris y se acercó a nosotros. Eris se lo tomó como un descanso y se tiró al suelo de espaldas respirando con fuerza sin aliento y con los brazos y piernas estiradas.
"Así que los 7 Campeones Mundiales... Qué recuerdos."
Ruijerd le echó un vistazo al monumento de piedra mientras decía esto.
"Ruijerd-san, ¿a qué te refieres con eso?"
"A que cuando fui joven, yo mismo fui uno de los incontables Guerreros que aspiraban a aparecer en el listado de los 7 Campeones Mundiales."
Esas palabras las dijo mirando en la distancia como si del pasado se tratase.
Mirando a lo lejos, muy a lo lejos... muy muy muy a lo lejos... ¿¿Exactamente de hace cuántos años estamos hablando??
"¿Y qué son exactamente los emblemas que aparecen?"
"Son el símbolo de cada uno de los individuos que lo componen. Aún a día de hoy, muestra a los 7 más poderosos que conocía."
Ruijerd señala uno por uno a todos los emblemas diciéndonos el nombre de quién representan.
Los actuales 7 campeones son:
1ª Posición: Dios de las Técnicas
2ª Posición: Dios Dragón
3ª Posición: Dios de la Lucha
4ª Posición: Dios Demonio
5ª Posición: Dios de la Muerte
6ª Posición: Dios del Filo
7ª Posición: Dios Nórdico
"Ohh~~... pero qué extraño, ¿por qué no he oído nada sobre los 7 Campeones Mundiales hasta ahora?"
"Es normal, eran muy populares y conocidos hasta que llegó el fin de la campaña militar de Laplace."
"¿Y eso? ¿Por qué dejaron de serlo?"
"Porque durante la campaña, hubo varios cambios en la lista, por muertes y desaparecidos."
Por lo que parece, quitando al Dios de las Tecnicas, el resto de miembros de la lista de los 7 campeones de aquella época participaron en la campaña de Laplace; de los participantes, 3 murieron, 1 desapareció y otro acabó siendo sellado; y el único que sobrevivió sin salir mal parado fue el Dios Dragón de entonces.
Tras la campaña, empezó una enorme competición para ver quienes serían los que sustituirían a los caídos en el monumento, y pasados varios siglos, los que actualmente los Campeones Mundiales Menores, que es como se conoce a los números más bajos de la lista se alejaban demasiado de lo que antaño se conocía como Campeón; y por si fuera poco, 4 de los más poderosos están en paradero desconocido.
Dios de la Técnica: Desaparecido.
Dios Dragón: Desaparecido.
Dios Combativo: Desaparecido
Dios Demonio (Laplace): Sellado.
Como los más poderosos del ranking están fuera de cobertura, poco a poco fue perdiéndose interés en los 7 Campeones Mundiales y poco a poco desapareciendo de los recuerdos de la gente. O algo por el estilo.
Por cierto, el motivo por el que el Dios Demonio Laplace continúa en la lista es porque no murió, sino que fue simplemente sellado.
"¿Cómo es posible que alguien siga con vida después de tantísimos años desde aquello?"
"Bueno... incluso hace 400 años se rumoreaba sobre si existía de verdad el Dios de la Técnica siquiera."
"Ah, sí, sobre ese, ¿por qué motivo iba alguien como el Dios de la Técnica crear este ranking?"
"Por lo que se decía, el motivo fue Encontrar a alguien que pueda vencerme, o eso se rumoreaba por aquel entonces, pero no sé mucho más, la verdad."
Vaya, suena igual al Fukamichi Ranking.
"Este monumento de piedra tiene ya muchos años, ¿no? Si es así, es muy posible que el ranking haya cambiado con respecto a lo que pone aquí, ¿no creéis?"
Tras decir lo que pensaba, Gisu negó con la cabeza.
"No, por lo visto se actualiza solo mágicamente."
"¿Eh? ¿En Serio? ¿Y cómo lo hace?"
"¿Cómo voy a saberlo?"
Tiene sentido que novato no lo sepa; pero vaya, los símbolos que aparecen en el monumento se actualizan automáticamente... ¿me pregunto como funcionara? Todavía me faltan cosas por aprender sobre la magia de este mundo; si voy a la universidad de magia, ¿podré aprender sobre cosas como esta?
Pero volviendo al tema, así que 7 Campeones Mundiales... Cada vez tengo más claro que este mundo está lleno de gente que apesta a chetos, gente a la que dudo le pueda seguir el ritmo; aunque claro, tampoco es que mi meta sea convertirme en el más poderoso, prefiero evitar buscarme problemas con gente de ese nivel.
8ª Parte
Tardamos 1 mes en terminar de atravesar el Gran Bosque, pero en realidad, fue solo 1 mes... con solo ese tiempo, pudimos atravesar completamente de punta a punta el Gran Bosque.
El camino era una recta perfecta por la que no se nos cruzó ni un solo monstruo, por lo que pudimos dedicarnos únicamente a avanzar. Y aunque esa fuera una de las razones por las que pudimos terminar tan pronto ese tramo, otra fue la resistencia del caballo que tiraba del carro; me hace pensar que los caballos de este mundo no saben lo que es acabar agotado. Nuestro caballo es capaz de mantener un buen ritmo durante 10 horas cada día sin tomarse un solo descanso, y por si fuera poco al día siguiente siempre estuvo como nuevo.
Me pregunto si estarán utilizando el maná de alguna forma para ello, o algo por el estilo.
Pero finalmente acabamos el trayecto por el bosque sin ningún percance, lo único no especialmente destacable es que me salieron almorranas durante el trayecto de estar tanto rato sentado; aunque por supuesto, no se lo dije a nadie y las curé a escondidas con magia curativa.
Por su parte, Eris, diciendo que se trataba de un entrenamiento, se puso de pie sobre el techo del carruaje durante gran parte del trayecto. Le dije varias veces que era peligroso y que parara, pero Eris tal equilibrio en su cuerpo que al verla me hacía pensar sobre qué podría ser peligroso de algo así.
Por cierto, intenté imitarla, pero al día siguiente era casi incapaz de mantenerme en pie por las agujetas; aumentando enormemente mi valoración de Eris, esa chica es realmente sorprendente.
Nuestro siguiente tramo era un valle por el que atravesar la cordillera Dragón Azul, aunque hicimos una parada al comienzo del mismo, lugar en el que habían construido un pueblo casi únicamente para posadas; que los mineros del carbón (Enanos) se encargan de administrar, sobretodo en el distrito de posadas.
La ciudad no posee un gremio de aventureros, pero es una ciudad famosa por sus herreros, en la que todas las tiendas de armas y armaduras están comunicadas entre sí. Gisu nos estuvo indicando que las espadas que venden en esta ciudad no solo son baratas, sino que además son de buena calidad.
Eris miraba la mercancía como queriéndose llevar todo, pero no tenemos tanto dinero como para gastar innecesariamente; sobretodo recordando que para atravesar el mar hasta el continente central, seguramente nos cueste otro dineral que un Supard se monte en barco. Por lo que no podemos derrochar, además que la espada que está utilizando Eris por el momento se conserva bien.
Pero aun así, soy un hombre amante de estas cosas, ver tantas espadas afiladas y armaduras colocadas en sus estantes, es fácil excitarte ante tal espectáculo; aunque claro, el problema estaba en la edad de este cuerpo, y que no parecía que hubiera armaduras para mí. El enano que atendía la tienda llegó a decirme entre risas que lo que ofertaba no estaba hecho para mí.
Intenté resarcirme diciéndole que aun siendo tan joven soy un Practicante del Filo Celestial, haciendo que se sorprendiera un poco; pero al final, con nuestra falta de fondos, la conversación acabó entre bromas sin poder comprar nada.
Por lo que Gisu nos cuenta, este punto es especialmente de interés ya que aquí la ruta de la espada sagradase se divide en varios trayectos. Si sigues la cordillera hacia el este, supuestamente llegarías a la ciudad de los mineros del carbón (Enanos); si vas hacia el noroeste, entrarás en territorio de los orejas puntiagudas (Elfos), y al noroeste es donde se encuentran dispersas las aldeas de los cuerpo de niño (Hobbits).
No entiendo por qué esta ciudad no tiene gremio de aventureros, pero seguramente sea en parte por la localización en la que se encuentra.
Por otra parte, he escuchado que si te adentras en las montañas, puedes encontrar aguas termales.... Vaya... ese tema me interesa especialmente.
"¿Qué es eso que llaman aguas termales?"
"Es agua caliente que emana de la montaña y se acumula en algo así como pequeños lagos; es un sitio genial en el que darte un baño."
"Ohhh... suena bien. Aunque dime, Ludeus, si es la primera vez que has venido a esta zona... ¿Cómo sabes eso de las aguas termales?"
"P-porque lo leí en un libro."
No estoy seguro de si mencionaba las aguas termales en Recorriendo el Mundo del Conde Sanguinario. No me suena la verdad, aunque no estoy seguro... Pero bueno, volviendo al asunto principal, aguas termales... qué bien suena; aunque dudo que en este mundo tengan algo similar a un yukata, pero claro, pelo mojado, piel cogiendo un tono rosado Sakura, Eris relajándose en el agua caliente... todo eso se puede encontrar en las aguas termales de aquí... no creo, porque dudo que existan los baños mixtos, aunque no sé bien como lo harán. ¿Te imaginas que por imposible que sea, fuéramos y nos encontráramos con unos baños mixtos en las aguas termales? ¡Quiero apostarlo todo a esa minúscula posibilidad!
"Pero como justo acaba de terminar la época de lluvias, esa parte de la montaña seguramente esté impracticable o en mal estado."
Justo cuando mi determinación había llegado a su punto más álgido, Gisu rompió mi burbuja; añadió que las personas que no están acostumbradas a desplazarse por zonas montañosas no deberían adentrarse en ellas por estas fechas debido a los retrasos y contratiempos que pudieran sufrir.
Visto así, vamos a tener que olvidarnos de las aguas termales... qué mala suerte...
9ª Parte
La Ruta de la Espada Sagrada se adentró por mitad de la cordillera del Dragón Azul, aunque el camino era bastante estrecho, con el ancho justo para 2 carruajes, más o menos. Pero seguía siendo un camino que partía la montaña en 2, creando un valle que iba desde la cumbre hasta lo más bajo de la montaña.
Aunque pueda parecer peligroso, por lo visto, quizás debido a la protección divina de Milis, casi nunca hay derrumbamientos o desprendimientos por este trayecto. Y si lo piensas bien, si no existiera este trayecto, sería necesario dar un enorme rodeo para cruzar del Gran Bosque a Milis; ya que aunque casi nunca haya dragones azules por la cordillera, sigue habiendo monstruos, por lo que intentar atravesar las montañas te arriesgarías muchísimo a posibles ataques.
En un lugar como ese, existe un atajo que atraviesa las montañas y por el que no encontrarás a ningún monstruo; normal que le rindan culto a Milis con tanto fervor.
En 3 días terminamos de atravesar la cordillera por el valle de la ruta de la Espada Sagrada y por fin dejamos atrás el territorio del Gran Bosque para entrar finalmente en territorio humano.
Fin del Volumen 04
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