jueves, 22 de marzo de 2018

Iris en Días Lluviosos 4.2



Experimento de Re-inicialización de Ralph Ciel

Al ver el hermoso cuerpo de la joven chica yaciendo en la cama, Ralph suspiró.

…Ha pasado mucho tiempo.

En ese día hace tres meses, él había llamado una vez a la joven chica para darle las malas noticias. Ahora, parecía como algo que hubiera ocurrido hace mucho.

Los restos de un robot al que solo le quedaban su cabeza y brazo derecho fueron dejados en una caja transparente en el fondo del laboratorio. Para reciclarlo, estuvo ocupado todas unas largas vacaciones, yendo frenéticamente de aquí para allá. Debido a esto, finalmente encontró el circuito mental que se supone es la línea de vida de un robot, hace unos pocos días.

Terminó la revisión, exhausto. Entonces, presionó el botón que proporcionaba energía eléctrica.

Después de un

¡zas!, el hermoso pecho de la chica palpitó violentamente, y entonces recuperó su estado original.

Ralph se quedó mirando a la situación que se desarrollaba en frente de él.

…Esa persona era una genio.

Un rubor rojo apareció gradualmente en el rostro blanco de la joven. Incluyendo detalles como este, la hechura de este robot había sido meticulosa.

— Mnn…

Finalmente, la joven hizo un leve sonido.

Ralph se paró de la silla, acercándose al lado de la cama. La chica lentamente abrió sus ojos, un brillante reflejo resplandecía en sus ojos azules. Aunque no era del mismo color, los profundos ojos le recordaban a los ojos de la fallecida Profesora Umbrella. La robot había sido hecha a partir de la apariencia de su hermana, así que era entendible.

Para él, la existencia de la mujer Umbrella es muy importante. Ralph finalmente entendió esto después que ella hubo fallecido. Ralph entró al centro de investigación a la tierna edad de quince años, y la conoció mientras practicaba. Umbrella fue su Profesora, y era también una hermosa flor que solo podía contemplar desde la distancia. Cuando ella lo escogió para que fuera su asistente, él pensó que todo el emitía una radiación rosa, e incluso creyó en la presencia de Dios.

Sin embargo, aunque Ralph sentía algo por ella, no expresó sus sentimientos, enterrados en su corazón hasta el último segundo. Esto era porque él tenía claro que su silueta no se reflejaba en las pupilas color ámbar de ella. La única persona en sus ojos era la joven… número de certificación HRM021-α.

— ¿Pro… fesora?

La joven que yacía sobre la fría cama, murmuró débilmente.

El hecho de que la joven despertara justo en ese momento, ¿Qué significado tenía para él? Ralph se preguntó a sí mismo. Sin embargo, su respuesta era bastante obvia. Ralph amaba a la Profesora Umbrella, y la respetaba desde el fondo de su corazón. Era por eso que no podía abandonar a la joven que la Profesora había amado.

— ¿Entiendes lo que digo? ― Preguntó Ralph en una profunda y calmada voz.

La joven abrió sus labios lentamente, y dijo en voz baja:

— Sí… — Al escuchar su voz melodiosa, Ralph no pudo evitar pensar que en verdad se parecía a la Profesora Umbrella.

— El circuito de control de los movimientos todavía se está reinicializando. Puedes moverte cuando pasen treinta minutos, así que por favor espera un poco.

La joven pestañeó, asintiendo levemente.

Entonces, ella dijo tranquilamente.

— La lluvia… se ha detenido…

Cuando su cuerpo fue capaz de moverse, la joven levantó la parte superior de su tórax de la cama y preguntó.

— ¿Por qué… estoy aquí?

La joven chica miró a Ralph con sus azules y profundas pupilas.

En ese momento fue cuando Ralph se dio cuenta de algo. En comparación con la última vez que se habían visto, el color de las pupilas de la chica había cambiado ligeramente. Las pupilas de la chica habían cambiado de su color original, un vibrante azul cielo o un fuerte y profundo azul, sus pupilas ahora eran hermosas como el cielo azul después de un huracán.

— Primero mira esto.

Ralph le pasó un espejo en las manos. La chica miró al espejo, mostrando una expresión perpleja. Cabello marrón carmesí que llegaba hasta sus hombros, piel blanca, pupilas azules… El espejo reflejaba a la silueta de la niña de quince años, Iris Umbrella.

— Entonces, déjame contarte lo que ocurrió.

― Dijo Ralph mientras movía una silla hasta el lado de la chica. Después de eso, explicó lentamente qué había ocurrido hasta ahora.

Después de que la Profesora Umbrella falleciera, a Ralph se le ordenó hacerse cargo de las pertenencias de la Profesora Umbrella. De esta forma, encontró el “testamento” de la profesora en un gran montón de papeles y libros que habían quedado en el centro de investigación. Para ser exactos, el testamento era solo un borrador, y parecía incompleto, y ni siquiera tenía un sobre. Encontró el testamento tres días después que la Profesora Umbrella hubo muerto.

Fue entonces que se dio cuenta del asunto de Iris, e inmediatamente contactó a la residencia Umbrella, pero ya se la había llevado el Departamento de Manejo de Robots . Ralph no pensó que serían tan rápidos, y los cambios repentinos le hicieron sentirse confundido.

Ralph inmediatamente empezó a investigar la ubicación de Iris. Sin embargo el

Departamento de

Manejo de Robots se negó a decirle algo sobre Iris haciendo uso de su deber de confidencialidad como razón. Al final, todavía no había podido encontrar a Iris, quien había sido convertida en metal chatarra.

Tres meses después de la muerte de la profesora Umbrella, Ralph que había dejado temporalmente a un lado el asunto, repentinamente se enteró de una noticia extraña. Alguien había encontrado un robot colapsado en la Plaza de la Fuente de Venus, y éste le había dado a la estatua de la diosa un estuche de cigarros. Eso fue lo que había escuchado de su reportera amiga, Karen Cloudy.

Recordando el contenido del testamento de la Profesora, Ralph comenzó a investigar el robot, solo por intuición. Por último, debido a su apasionada perseverancia y por supuesto, también ayudó pagar una cierta cantidad de dinero. Sacó los restos del robot utilizando la “eliminación de desechos” como excusa. Al ver la foto de grupo de la Profesora y Iris pegada al estuche de cigarros, la intuición de Ralph se concretó.

Y así, finalmente recuperó el cuerpo de Iris. El haber sido capaz de terminar el mantenimiento tan rápido también era a causa del cuerpo “de repuesto” que la Profesora había preparado para Iris.

—…Este es el testamento que dejó la Profesora. ― Ralph le pasó la carta que había guardado en un sobre azul. Ella lo tomo con manos temblantes, y comenzó a leer la carta que comenzaba con un “Querida Iris”.

Después de un tiempo, Ralph continuó.

—…Las pertenencias de la Profesora Umbrella ahora son tuyas. Sin embargo, la ley no reconoce la tenencia de propiedades por robots, así que la propiedad se mantendría a nombre del Primer Laboratorio Robótico de la Universidad Oval . También…

Luego de escuchar estas palabras, Iris solo asintió en silencio.

Ella comenzó a sollozar, caían lágrimas a voluntad propia, en sus manos. Al ver que sus ojos estaban húmedos por las lágrimas, Ralph pensó, que eran hermosos.

— Bueno, por favor espera un poco.

Luego de terminar lo que necesitaba decir, Ralph se paró de su asiento.

Cuando volvió unos cinco minutos después, Iris ya no estaba en la cama, se apoyaba en la pared, tenía puesto una tela blanca, que era como cortinas blancas. Y la caja de aproximadamente un metro de ancho estaba delante de ella, y los restos del robot estaban al interior. Su cuerpo “anterior”, el cuerpo que solo tenía una cabeza y su brazo derecho, un cuerpo que era como chatarra de metal.

— ¿Puedo… tocarlo? ― Le preguntó a Ralph titubeantemente.

Ralph presionó un botón, y abrió la caja transparente mientras decía:

— Mmm, seguro.

Como si estuviera confortando un niño dormido, Iris acariciaba la mejilla del robot. Entonces, se agachó, abrazando los restos del robot mientras decía gentilmente:

— Gracias por su duro trabajo…

Lágrimas cayeron de su hermoso rostro, goteando sobre el pecho del robot.

Ralph la observaba en silencio. La silueta de la joven sosteniendo en sus brazos los restos del robot parecía en gran parte poco realista, pero era una escena extraña que llenaba los corazones de las personas de dolor. Tres años atrás, cuando llevó a la joven niña HRM021-α para arreglarla, probablemente había tenido los mismos sentimientos.

Después de que Iris aflojara sus brazos de mala gana, Ralph preguntó.

— Bueno…lo que fui a buscar ahora fue esto.

Una caja de cartón teñida de negro debido al aceite de moto que había en sus manos.

— Esta caja de cartón estaba en el pecho del “cuerpo” que sostenías. Hay un mapa y una tarjeta de crédito a nombre de otra persona, qué es…

En ese momento, la expresión de Iris cambió instantáneamente.

Sus ojos azules se agradaron, le arrebató la caja de cartón y abrió su cubierta. Un grupo de fotos de una joven de unos doce o trece años que parecía ser su pariente estaba pegada en la caja.

— ¡Erm!

― Gritó de repente.

Entonces, agarró los hombros de Ralph, acercando su rostro como si quisiera besarlo. Ralph preguntó sorprendido:

— ¿Que-qué ocurre?

— ¿¡Cuánto tiempo ha pasado desde que me trajiste!?

Ralph respondió confundido:

— Err… Como dos semanas…

— Dos semanas…

 — Iris sujetó la caja con fuerza, levantando su rostro que estaba lleno de determinación.

— ¡Voy a salir!

Después de gritar eso, abrió la puerta de la habitación y se precipitó hacia afuera, solo llevando encima un delgado pedazo de tela.

Ralph se quedó en blanco, de pie, sin moverse, entonces la siguió rápidamente, confundido.

Corrí sin zapatos. El Señor Ralph me gritaba algo desde atrás, pero su voz está fuera de mi rango auditivo. Mi batería está llena. Aunque el sistema de control de movimiento de mis extremidades todavía tiene algunos defectos, no me importa.

Han pasado dos semanas desde eso.

…¡Dios! ¡Oh, Dios!

Le rogué en repetidas ocasiones a la estatua de la diosa que se parece a la Profesora. Corrí sin parar, precipitándome hacia delante a una velocidad de cien metros en nueve segundos. Como si fuera a darle la bienvenida a mi querida profesora por su llegada, avanzaba directamente hacia delante. Mi cuerpo solo estaba cubierto por una tela blanca, pero no me importaba.

El centro de investigación estaba bastante cerca de la residencia Umbrella, y tampoco estaba demasiado lejos de la plaza de la fuente donde se erguía la estatua de la diosa.

También, estaba bastante cerca del lugar adonde ella está.

Mientras corría, busqué la información del mapa de la ciudad. La información de la memoria y la del mapa calzaron rápidamente. Podría encontrarla después de correr en dirección opuesta al sistema de drenaje de la plaza de la fuente.

Finalmente llegué al barrio comercial. El encargado de la tienda de pescados gritó sorprendido:

— ¡¿Eh, Iris?!

— Lo saludé con mi mano mientras sonreía, y entonces empecé a correr otra vez.

La estatua de la diosa cada vez se agrandaba más en mi campo de visión. Ancianos hablando, niños jugando y parejas expresando su amor, estaban sentados en los bancos cercanos. Esta era la escena que más me gustaba. En frente de mí estarían los restos de la tienda de chatarra. Cuando pienso sobre ello, que una vez agoté toda mi batería en este lugar. Sin embargo, ahora no importaba. Continué corriendo sin detenerme después de doblar en la esquina, entré en un área residencial.

Así, finalmente he llegado a “esa casa”.

Entré al patio anterior, había un desagüe que daba la impresión de que le habían arrancado algo, los rastros que yo había dejado aquí.

Llegando al patio trasero, había tubos rotos por todas partes. Esas eran partes de mi cuerpo.

Después de eso, me arrodillé en el suelo, y busqué entre los arbustos arrastrándome.

Busqué nerviosamente.

Dios.

Ah, dios, gracias.

— Lilith…

La niña estaba esperándome, manteniendo su postura original con sus ojos cerrados como si estuviera dormida.


La Carta de Iris Rain Umbrellla

Querida Profesora.

Como usted me ha escrito una carta.

Por eso, también yo estoy escribiendo una carta para usted. Aunque digo eso, de hecho estoy escribiendo unas notas para la “conversación especial”.

Profesora. Primero, voy a escribir lo que me hace feliz. Lilith despertó la semana pasada. Ah, Lilith es mi nueva amiga. Es buena hablando, es valiente, y es muy confiable. Cuando la encontré en los arbustos del patio, suspiré largamente.

¿Pudo haber sido la guía de la estatua de la diosa?

¿O el poder de la Profesora?

Luego de tener este cuerpo, me di cuenta que el color de su cabello es dorado. Mi visión era de un solo color antes de esto. La Lilith de cabello dorado es mucho más linda. Sin embargo, todavía odia usar trajes de doncella. Yo creo que se le ven bien. Profesora.

 Aparte de Lilith, también he hecho un nuevo amigo. Su nombre es Volkov. Para protegernos a Lilith y a mí, él falleció en una batalla contra los militares. Con la ayuda del Señor Ralph, obtuvimos un fragmento negro de él. Una parte del cuerpo de Volkov fue enviada al centro de investigación como una pieza de información.

Ahora, Lilith guarda solemnemente el fragmento de Volkov en su pecho. Profesora. Después de perder a la a usted, no supe cuál era el significado de mi existencia. Sin embargo, después de que entré en contacto con el mundo exterior, y trabajé frenéticamente, y que conocí a Lilith y Volkov, aunque todavía estoy confundida de cierta forma, creo que encontré lo que necesito hacer. Profesora,

¿Conoce el libro para niños “ El demonio de tercer rango Visa Darke ”


El libro cuenta las historias de un dios demonio Darke a quien le gusta divertirse con su anillo mágico Flo Snow y se mete en varios problemas debido a algunas herramientas mágicas. Oh, cierto. Darke es bastante parecido a la Profesora. Ambos parecen fríos a primera vista, pero son de hecho bastante gentiles.

Darke le dio a Flo Snow un nuevo anillo al final. Profesora de su parte me dio un nuevo cuerpo.

El gentil dios demonio murió antes del último volumen, Flo lloró del dolor de haberlo perdido por mucho tiempo. Sin embargo, mientras se recuperaba de su tristeza, comenzó a tener nuevos desafíos.

Como Darke hubiera hecho en el pasado, ella empezaría a coleccionar herramientas mágicas rotas para arreglarlas, creando un nuevo “hogar” para las herramientas mágicas que habían perdido su poder.

Ella heredó los gustos del fallecido Darke, y encontró un nuevo significado para su existencia. Es por eso que quiero crear un “hogar” como ella. En palabras simples, un “refugio” para robots. Quiero traer a los robots que han perdido a sus amos, que han sido abandonados, que han dejado el campo de batalla, o que ya no pueden seguir trabajando en sitios de construcción, a esta mansión.

Entonces, trabajaremos juntos y ganaremos dinero. El dinero que obtengamos lo usaremos para pagar las reparaciones y nuestras recargas de energía. El Señor Ralph aprueba mi idea. Él también reparará y hará el mantenimiento de mis funciones durante su tiempo libre. Es buena persona.

Después que le mencioné la idea del “refugio para robots” a Lilith, lo primero que ella dijo fue: “Será interminable si las cosas continúan como están, así que será mejor que te rindas”.

Ella me dijo que decenas de miles, e incluso cientos de miles de robots son abandonados cada año, y lo que quiero hacer es simplemente inadecuado, que solo desperdicio tiempo y dinero. Sin embargo, después de poner el aviso publicitario del refugio, número Veintisiete y Cincuenta y cinco, ah, errr, esos números son los nombres de mis colegas anteriores, l

lamaron a la residencia Umbrella en tres días. Lilith quién atendió el teléfono era la más sorprendida. Número Ochenta y Seis nos contactó antes de ayer.

“ Ya que las cosas resultaron así, solo déjalos trabajar aquí” , fue lo Lilith decidió. Ella quiere trabajar duro en un sitio de construcción para ganar dinero. Solo siento que estaremos bastante ocupados. ¿Recuerda al robot de la tienda de chatarra?

El enorme robot que apareció en las noticias por haber enloquecido en la plaza de la fuente. Lilith me dijo que su nombre era Lightning O’Milber. ¿Por qué enloqueció? Quería saber la respuesta sin importar lo que pasara, así que les pregunté a los encargados de las tiendas del barrio comercio sobre esto.

El encargado de la tienda de comestibles me contó algo. El propietario de la tienda de chatarra falleció unos pocos días antes que el robot enloqueciera. La relación entre el robot y su propietaria también era realmente buena.

 ¿La Profesora dijo esto, verdad? El robot ha de haber visto una alucinación. Aunque esta presunción puede ser demasiado determinante, no pude evitar suponerlo. El día en que corrió hacia la plaza, probablemente debió haber estado buscando a su propietario.

Yo he experimentado lo que se siente perder a tu propietario.

Cuando sea que pienso sobre la Profesora ahora, siento una abrumadora soledad y tristeza, y mi pecho se aprieta. Ahora que escribo esta carta, mis manos tiemblan.

Entonces, Profesora. Deténgannos aquí. Le escribiré de nuevo en otra ocasión. Verdaderamente suya, Su Iris.

Oh, y, ¡Profesora, profesora! ¡Mire para fuera de la ventana! El cielo es de un azul muy, muy bonito…

Amo los días cálidos y soleados como este.

Pero profesora. También me gustan los días lluviosos.

¿Pregunta por qué? Je, je, ¿No es obvio?

Porque conocí a mi amada Profesora en aquel día de lluvia.




FIN




Palabras Finales

Gusto en conocerlos, aquí Matsuyama Takeshi.

“Iris en Días Lluviosos” es la obra que obtuvo el cuarto lugar en el Premio Dengeki en su versión Novela número diecisiete y es también mi trabajo nuevo que ha sido esperado por mucho tiempo.

El personaje principal de la historia es una robot. La palabra “robot” de hecho se originó de la palabra “robota” en checo y significa “trabajo forzado”. Por la palabra “robot”, imagino que… los robots serían una existencia que no reemplaza el lugar de los humanos, no tendrían emociones, no sentirían dolor, no se quejarían de nada, así que serían herramientas muy convenientes. Por lo que, sentí que sería interesante escribir robots con una “existencia parecida a la humana”, y fue por eso que escribí este libro.

Así, esta historia que empezó desde el punto de vista de un robot. Aunque puede ser de alguna forma exagerado decir esto, mi objetivo era escribir una historia sobre el tema de “la destrucción y el renacimiento”. Aunque no había ninguna escena imponente de robots gigantes transformándose y reformándose (La razón principal es que me preocupaba poder escribirlo bien), pero si las esperanzas del robot para seguir viviendo pudiera tocar los sentimientos de todos, me sentiría bastante satisfecho.

Este libro solo pudo ser publicado con la ayuda de muchas personas.

A Tokuda-sama y Tsuchiya-sama del departamento editorial, les di un montón de problemas durante la edición. Cuando recibí una llamada telefónica del departamento editorial el otoño pasado, me alegré mucho. Y Hirasato-sama, quien fue el ilustrador, le agradezco por dibujar ilustraciones tan geniales. He guardado los primeros borradores de los dibujos en mi escritorio, aparte de eso, a los correctores, diseñadores de portadas y todos en ASCII Media Works, les expreso mi más profunda gratitud.

Aparte de eso, a los primeros lectores de Iris la pareja S, a quien me dio información K-sempai, S y quienes han cuidado de mí desde secundaria, a N y T que celebraron la publicación de este libro, a N y Y, mis colegas, mis estudiantes de primaria, secundaria y universitarios y sempais, y a mi familia y conocidos que amablemente han cuidado de mí. Muchas gracias.

Por último a todos los lectores que tomaron este libro en sus manos, gracias desde el fondo de mi corazón. Si las personas pensaran “Esto me recuerda, que he leído un libro así…” durante los días lluviosos, como autor estaría encantado.

Aquí, le doy a conocer este libro a la persona que he conocido desde secundaria, tímido algunas veces, pero que siempre se vuelve activo durante nuestras reuniones, mi buen amigo… Arai Sao.

Matsuyama Takeshi.







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